Eran otros tiempos, cuando McCartney y Heather Mills posaban felices para los flashes. Hoy el ex Beatle sólo desea que su divorcio salga de los titulares.
APLONDRES.- El ex Beatle Paul McCartney quiere poner fin a la pública batalla en que se ha enfrascado en las últimas semanas, por su divorcio de Heather Mills, ya que "sería bueno para ambos mantener una cierta dignidad".
"Uno debería recordar que se trata de un asunto privado. Probablemente así se solucione mejor", declaró el músico de 64 años, en una entrevista divulgada hoy por la emisora británica BBC.
El artista y Mills, de 38 años, se separaron en mayo y desde entonces sus declaraciones sobre el otro no han cesado de hacer titulares. La disputa por el divorcio se centra en el millonario patrimonio del ex Beatle y la custodia de su hija con Mills, Beatrice, de tres años.
McCartney declaró que pese a los enfrentamientos de los pasados meses se muestra "optimista" respecto de los futuros pasos del proceso. "He superado mucha tristeza a lo largo de mi vida, y hay un buen número de gente como yo. Por eso no me siento especialmente solo", dijo.