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Santiago: Jueves 30 de enero del 2025 | Actualizado 19:02
Después de dos años, Chayanne regresa a las grandes dimensiones de sus conciertos. Un Estadio Nacional el 27 de enero y tres conciertos masivos en Viña del Mar, Coquimbo y Concepción para este verano.
Chayanne.netSANTIAGO.- "¿Que cuál es la razón por que las mujeres se derriten a mi paso? De verdad no sé. Pero sí sé que yo me derrito con ellas”. La buena crianza y la sonrisa del amante latino más apetecido por el público femenino ya es parte de toda lógica en un artista como Chayanne. El cantante y bailarín portorriqueño actuará en Santiago, Viña del Mar, Coquimbo y Concepción entre el 27 de enero y 7 de febrero próximos. De paso fugaz por Chile para promocionar su gira, conversó con la prensa nacional.
El tour del disco Cautivo (2005) sigue en marcha. Hace pocos días Chayanne realizó una intensa temporada de actuaciones en México, en el interior y también frente a un público fuertemente ligado a su carrera en la capital, con cuatro presentaciones en el Auditorio Nacional. “Si mintieron, lo hicieron muy bien”, bromea el artista al recordar al público y la fiesta que generó su presentación cuádruple en Ciudad de México: “La verdad yo disfruto mucho del público y eso me hace feliz”.
La puesta en escena de la gira que lo trae a Chile después de dos años tiene grandes dimensiones. Para los conciertos en el Estadio Nacional (Santiago, 27 de enero), Sporting Club (Viña del Mar, 30 de enero), Estadio Sánchez Rumoroso (Coquimbo, 3 de febrero) y Estadio Municipal (Concepción, 7 de febrero), Chayanne utiliza escenarios de diferentes niveles, con ramplas de desplazamientos, dos pantallas gigantes laterales y una central donde se proyectan grandes imágenes.
Además emplea un staff de seis bailarines, una banda de siete músicos más dos coristas. En total, y sin contar el equipo chileno que trabajará con él durante la gira, la delegación llega a las 40 personas.
"No sé qué piensan las chilenas"
En el show también alterna muy bien las canciones pop dance clásicas (como “Fiesta en América”, “Provócame” o “Salomé”) y las baladas románticas latinas (“Completamente enamorados”, “Tu pirata soy yo” o “Dejaría todo”), mientras se desplaza con agilidad por el escenario ayudado incluso por las pequeñas ruedas que utiliza bajo alguno de sus zapatos. “Actuar en grandes estadios asusta. Siempre propongo ‘vamos a escenarios más pequeños’ pero me dicen ‘no, vamos al Estadio Nacional’”, confiesa.
-Tienes muchas fanáticas en todo el mundo, ¿cómo se portan las chilenas?
“(piensa un segundo)… No sé lo que piensan. Las fanáticas chilenas se han portado muy bien, son súper atentas y proyectan mucho cariño. Cuando he venido a participar de programas de televisión y he tenido la oportunidad de estar cerquita de ellas, se siente el cariño”.
-¿Cómo ves el ritmo de moda del reggaetón en tu carrera?
“Chayanne y el reggaetón son amigos. Puedes ver en mis álbumes, en las bases hay ritmos propios del Caribe y las islas. Es notorio. Ahora yo estoy bien en mi estilo, aunque nunca digo que no voy a hacer algo en el futuro".
-¿Y cómo has recibido el trifundo de otros artistas latinos en el mercado norteamericano, como Shakira y Juanes?
“Estoy feliz por el gran éxito de mis compañeros latinos. Siempre he tenido muchos sueños en la música. Todos hemos llevado carreras de muchos sueños. Yo he tratado de que cada paso que dé, deje una huella”.
-¿Qué sientes por no estar en Viña del Mar este año?
“Sí vamos a estar en Viña. No en la Quinta Vergara, en el Festival, pero sí voy. Viña siempre ha sudo súper especial".
-¿Y cómo lo has hecho para estar vigente durante 28 años de música?
“Lo que uno hace es tener los pies en la tierra. Se agradece cada cosa que uno logra, cada disco, cada aplauso. Si el público te ofrece un aplauso no dices ‘ah, era obvio’. Yo lo agradezco sinceramente. Muchas gracias”.
“Mi entrada en la música se dio natural. Mi abuelo era músico, mi madre cantaba todas las canciones de las películas mexicanas, mis hermanos tocaban acordeón y cuatro, en mi país había ritmos de baile como la salsa y el merengue. Yo empecé muy joven, a los 10 años profesionalmente y a los doce hice mi primera película”, cuenta Chayanne, cuyo verdadero nombre es Elmer Figueroa Arce, nacido en Río Piedra, Puerto Rico, el 29 de junio de 1968.
A los diez años se inició en Los Chicos, popular grupo pop latino durante los años ’80. Con ellos grabó cuatro discos. En 1987 se lanzó en su carrera solista y debutó con Chayanne. Una curiosidad, su segundo álbum llevó el mismo nombre y tuvo gran resonancia con el tema “Este ritmo se baila así”, donde Chayanne comenzó a hacerse magnético entre el público femenino por su capacidad como bailarín en escena. El video de esa canción logró un premio en MTV.
En 1990 grabó Tiempo de vals, con el que llegó a su primer Grammy como Mejor Artista Latino. Pero todo cambiaría a favor de su éxito masivo en el mercado regional latinoamericano con su cuarto álbum, Provócame (1992), con el cual su imagen muta al del amante latino perfecto.
En su álbum Influencias (1994) rinde homenaje a la gran escuela de artistas latinos modernos, como Julio Iglesias, José Feliciano y Juan Gabriel. Cautivo (2005), que tiene la colaboración del productor chileno Cristián Zalles y de Alberto Plaza, es parte de la última historia de Chayanne, la que lo traerá a Chile por decimosegunda ocasión (considerando programas de TV y promociones discográficas). Mientras, el artista ya trabaja en la elaboración de un nuevo álbum, que contará otra vez con la participación de Emilio Estefan como productor.
