CIUDAD DE MÉXICO.- Sylvester Stallone llegó cansado y de mal humor a la Ciudad de México para promocionar su última película, "Rocky Balboa", la sexta parte de la serie iniciada en 1976, que será estrenada en México el próximo 12 de enero.
El actor mostró poco agrado en posar para las fotos y evidenció franco mal humor si le pedían poses de boxeador. "Odio esto", fueron las primeras palabras de Stallone ante la prensa que lo esperaba en un hotel céntrico para la conferencia.
Los representantes de 20th Century Fox, encargados de la promoción y distribución del film, dijeron a la prensa que Stallone había pedido que no se le hicieran preguntas sobre boxeo ni boxeadores y que había adelantado que no firmaría autógrafos en guantes de box.
Sin embargo, sí le encantó hablar de "Rambo". Contó que prepara la cuarta versión y adelantó que ésta podría ser filmada en México, en Los Cabos, en el norteño estado de Baja California Sur.
"Elisa (Salinas, una de los productores que es mexicana) me dijo, Qué tal un Rambo en Los Cabos! ¨Un Rambo en Los Cabos?, mmm, me gusta esa idea", contó.
Stallone, actor, director y guionista, dijo que el de "Rambo IV" es un guión que le da mucho trabajo escribir: "Hace unos meses tenía unas 50 páginas a lo mucho, que eran buenas, pero reescribí, y reescribí, y reescribí. Al final te das cuenta que no hay guión perfecto".
Stallone, hijo de padres italianos emigrados a Estados Unidos, manifestó que la idea de construir un muro en la frontera entre México y Estados Unidos para impedir la migración indocumentada "es ridícula, es una locura".
El actor agregó: "No estoy de acuerdo, no creo que la solución del problema (de la migración ilegal) sea construir muros, el problema es que la gente no tiene qué comer, la gente tiene que sobrevivir y si te encuentras en esa situación tienes que tomar una decisión".