LONDRES.- El piano favorito del compositor polaco Frédéric Chopin, que utilizó en su última gira de conciertos por el Reino Unido en 1848, ha sido hallado en una mansión inglesa, informa hoy "The Times".
El instrumento, construido por el fabricante francés Camille Pleyel en 1846, pertenece a la colección del británico Alec Cobbe, que lo adquirió por 2.000 libras (unos 3.000 euros, 4.000 dólares) en una subasta sin saber quien había sido su ilustre propietario.
No ha sido hasta este año que un experto suizo sobre Chopin, Jean Jacques Eigeldinger, ha identificado el piano como el que perteneció al genial músico, que lo trajo de París a Londres cuando huía de la revolución en el continente.
Después de 160 años, el profesor de musicología de la Universidad de Ginebra recopiló los archivos de Pleyel y pudo trazar el paradero de los pianos elaborados por el francés, incluido el de Chopin.
Al comparar los números de serie, el experto identificó el número 13819 propiedad de Cobbe como el que Chopin había traído de Francia en 1848 y empleado en su gira de conciertos por el Reino Unido.
Los mejores
Durante su vida, el compositor tuvo muchos pianos Pleyel y de otros fabricantes, pero, según confesó, prefería los primeros, de los que dijo que eran "la última palabra en perfección".
A su llegada de París, donde vivía desde 1831, los fabricantes ingleses John Broadwood e Hijos le prestaron un teclado para tocar durante su estancia en el Reino Unido, pero el músico prefería tocar y componer en el suyo.
Con el Pleyel importado a Inglaterra interpretó un recital en la residencia londinense del conde d’Orsay y la condesa de Blessington, entre otros conciertos, señala "The Times".
Chopin interpretó otros recitales, incluido uno ante la reina Victoria, con el Broadwood -que también forma parte de la colección Cobbe-, pero, según confesó él mismo en unos diarios, disfrutaba más cuando tocada su Pleyel.
Ese piano pasó por diferentes manos antes de llegar a las del coleccionista británico Alec Cobbe, apunta el rotativo.
Se cree que, antes de volver a París al cabo de unos meses por motivos de salud, Chopin vendió el Pleyel por unas 80 libras a Lady Trotter, cuya hija, Margaret, era posiblemente discípula del músico.
Margaret Trotter habría pasado el piano a su sobrina, Margaret Lindsay, quien se casó con Lewis Majendie de Castle Hedingham.
Algún miembro de esa aristocrática familia vendió el instrumento en los años 70 del siglo XX y, en 1988, el instrumento fue adquirido por Cobbe, quien también posee pianos que fueron tocados o propiedad de músicos como Bach, Mozart, Mahler o Purcell.
El piano se expone actualmente, junto con el resto de la colección Cobbe de teclados antiguos, en la mansión de Hatchlands, en el condado de Surrey (sur de Inglaterra), donde los aficionados pueden escuchar por primera vez las melodías de Chopin interpretadas en su instrumento favorito.