Como en 1996, cuando la
frontwoman del grupo Ludwig Band interpretó a Carmela en "La pérgola de las flores", o luego como en "El velero en la botella" y "La emperrada", la ahora cantante de Matahari figura como parte de la ópera documental "Pasaporte". Se estrena este jueves y habla sobre testimonios, épocas y lugares de la memoria de Chile desde 1950 hasta el 2000.
Javiera Álvarez
Las voces de Ema Pinto y Annie Murath narran la historia (foto: El Mercurio). |
Pasaporte: recomposición de un pasado fragmentado, un espectáculo de Andreas Bodenhofer y la orquesta de Fuego con Ema Pinto y Annie Murath, no sólo se caracteriza por lo largo de su nombre, a parte, tiene variar cosas que contar.
Primero, es un espectáculo que entra en el género de ópera-documental, es decir, un registro en video de testimonios, épocas y lugares de la memoria emocional de Chile desde 1950 hasta el 2000, acompañado de musicalización de nueve instrumentistas y dos actrices-cantantes: Pinto y Murath.
Segundo, el estreno es este jueves en el Teatro Matucana 100 y sólo presentarán cuatro funciones los días 30, 31 de marzo y 1 de abril.
Por último, la historia está contada desde la vida del director y músico Andreas Bodenhofer. Ema Pinto, una de las cantantes-actrices del espectáculo cuenta que "el documental recompone un pasado a través los hechos históricos que marcaron a Andreas. Tanto sus viajes, como la forma en que se vivía social y culturalmente en esos países. Frente a eso, se hace una memoria musical".
"Nosotros aportamos con que la música interactúe con los testimonios, los textos o las imágenes filmadas, eso lo hace una propuesta interesante. Somos parte e instrumento de la historia que él quiere contar", asegura Pinto.
A pesar de ser un recuento de vivencias personales, el documental representa el pasado de muchas personas. "Es como una memoria colectiva y emotiva a la vez. Las memorias colectivas no existirían sin memorias individuales. La gente entrevistada es parte de su historia, pero también es parte de Chile y de otros países", dice Pinto.
Y sigue, "Es una mirada emotiva y honesta de diferentes etapas de la historia".
Pasaporte en escena
La reconstrucción de Bodenhofer está fragmentada en varios episodios. Primero, habla de cómo se vivía en el Santiago de los años ‘50 y ‘60. Luego, da un salto al Movimiento del ‘68 en Alemania y Francia y, a través de testimonios, cuenta sobre la ruta que hizo junto a los hippies hasta Katmandú.
Además, habla de su venida a Chile atraído por la Unidad Popular, para seguir con el exilio que vivió en Paris. Después, muestra su reencuentro con la música y Latinoamérica en Lima, para volver definitivamente con el Plebiscito del ‘88.
"Su historia es bien especial, no es como todas las que ha vivido un chileno normal. Participó en un movimiento y vivió con los hippies. Eso es muy interesante", cuenta Ema Pinto.
En el escenario están los músicos, las dos cantantes-actrices y una gran pantalla donde se proyectan las imágenes. Bodenhofer, desde su piano, dirige a la Banda de Fuego, nombre que él mismo inventó para sus instrumentistas que acompañan al documental con cuerdas (viola y cello), ritmo (bajo y batería) y metales (saxofón, trompeta y trombón).
La música está compuesta en su mayoría por el director, pero también, en algunos momentos, se escuchan acordes de Silvio Rodríguez y Víctor Jara. Más sonidos de esta historia.
