CANNES.- "Yo ya tengo 42 años y si no aprendo de gente más joven voy a empezar a ser un clásico", aseguró hoy en Cannes el director mexicano Guillermo del Toro, director de "El laberinto del fauno".
Claro que el reconocido cineasta no se refiere a la trascendencia que podría alcanzar, sino a un anquilosamiento en las ideas, que puedan ir añejando los proyectos. Por ello destacó la necesidad de haya "gente nueva en el cine de habla hispana".
Tras el éxito el año pasado con "El laberinto del fauno", que compitió por la Palma de Oro, el realizador regresó a la Costa Azul francesa para apadrinar el estreno de "El orfanato", la primera película del español J.A. Bayona, que Del Toro produce. "Nunca he producido ninguna película que no crea en ella absolutamente", aseguró el mexicano.
"El orfananto", que se enmarca en el cine de terror, está protagonizado por Belén Rueda ("Mar adentro"), quien da vida a una madre que vive la desaparición de un hijo.
Del Toro hizo una argumentada defensa de este cine, que suele ser menospreciado por parte de la crítica especializada. "El género de horror es el que toma el pulso de la realidad social en todas las décadas en que está, sea en los 50 con la Guerra Fría, sea en los 70 con la guerra de Vietnam, sea ahora con la descomposición social tan profunda que vivimos. Es un género perfecto para hablar de estas cosas y de las emociones humanas", explicó.
"Para desgracia de un sector de la crítica, conecta con una parte del público", agrega el cineasta, que debutó en el certamen francés en 1993 con "Cronos". "El cine fantástico está infinitamente mejor dotado que ningún otro género para tocar un lado místico de aquel que sea alcanzable", añadió.