Matías del Río: "Los que creen que soy un iluminado, se pueden desilusionar"

SANTIAGO.- A partir del 25 de junio, el noticiero nocturno de Chilevisión dejará de abrirse con el clásico "aquí empieza, Úuuuuuultima Mirada", de Fernando Paulsen. Como el propio conductor lo ha anunciado, dejará el cargo para estudiar en Harvard, así que desde esa noche la imagen del periodista con las mangas arremangadas listo para acorralar con preguntas, no va más.

En cambio, los televidentes tendrán que acostumbrase a la bienvenida que les dará un periodista de ojos achinados y lentes gruesos: se trata de Matías del Río, ex rostro de "El Termómetro" y actual conductor de Radio Duna.

Consciente de que está reemplazando a un peso pesado del periodismo nacional, Del Río se tiene confianza. Cree tener una experiencia que lo avala para su ascenso, con éxitos y, lo más importante, con fracasos, que no tiene problemas en reconocer. Como cuando pidió que lo bajaran del cargo de sub editor de revista Capital al de reportero, en su primer año en el magazine de economía.

"No di el ancho. Fracasé, lo hice pésimo", dice. "Por eso conversé con mis jefes, antes que me echaran, para que me quitaran el cargo y me bajaran el sueldo. Creo que fue la mejor decisión de mi vida, además de que seguí trabajando cinco años más en la revista".

Claro que la situación ahora ha cambiado. Con más experiencia en el cuerpo, no se ve pidiendo que lo bajen a reportero en Última Mirada. "Nos va a ir espectacular", agrega con seguridad.

Última Mirada está identificado con Fernando Paulsen. ¿Cómo asumes su reemplazo?
"Lo tomo de la misma manera como tomé 'El termómetro', que estaba igual de identificado con Iván Núñez: con el desafío de mantenerlo bueno, pero poniéndole un sello. Las modificaciones se van a ir dando por mi estilo de conducción, de hacer periodismo, por la forma de preguntar”.  

¿Cómo es tu relación con el poder?
"No es cercana ni lejana, es la de un periodista no más. Pero tampoco soy un aparecido en esto. No hice la práctica en el verano. Hace siete años que vengo entrevistando a candidatos presidenciales, Presidentes, parlamentarios, ministros y empresarios. Así que en el programa entrevistaré a los que tienen que estar".

Paulsen era muy cercano con las autoridades, hasta los tuteaba.
"¿Sabis qué? Tutearé a los que me nazca tutear. La mayoría de las veces, yo suelo tratar de usted. Pero no lo pongo como dogma. Cuando entreviste a Pato Walker, con el que fuimos amigos desde chicos, probablemente se me va a salir el tuteo. Pero si entrevisto a Longueira o Zaldívar, los voy a tratar de usted. No hay nada escrito, compadre, y no pretendo escribir nada tampoco".

No eres de los periodistas que defienden a muerte la distancia con la noticia.
"No, prefiero defender a muerte otras cosas más importantes, como por ejemplo la honestidad. El deber como periodista de hacer la pregunta que tengo que hacer. La formalidad, la distancia, es un concepto que pasó de moda. Y uno de los que rompió eso, fue justamente Paulsen. Paulsen y sus mangas arremangadas son mucho más que una formalidad. Es un estilo distinto, donde lo que importan son otras cosas. Por algo el público le cree".

¿Aún piensas que estás sobrevalorado?
"Sí, siempre. Pero eso no quita que vaya a enfrentarme a la conducción de Última Mirada con todas las ganas y energías que pueda, tal como lo hice con 'El Termómetro', que tuvo una última temporada increíble. Pero considero que estoy sobrevalorado como mucha gente en el medio. No soy de los que endiosan la televisión, que creen que están ahí porque son genios. Es un oficio nomás. No le pongan tanto color. A los que creen que soy un iluminado, les prevengo que se pueden desilusionar".

Nunca has dicho cómo te sentiste después de que "El Termómetro" se cancelara. ¿Qué explicación te dieron?
"No, no. Cuando yo compre el canal, voy a pedir explicaciones. Al programa no le iba mal, pero entiendo que Chilevisión quería competir en un horario donde las teleseries son mucho más rentables".

¿Extrañas el programa?
"Todos los días y la gente en la calle siempre me lo recuerda. A mí me gustaría que TVN y Canal 13 dedicaran ese horario a hacer programas de debate. Pero en fin, el mercado (televisivo) está así. Y Chilevisión tiene que competir con teleseries en ese segmento".

¿Paulsen ya te entregó formalmente el poder?
"Hemos comido juntos estos últimos días. Somos super amigos, pero no ha habido nada oficial. Si me tiene que dar algún consejo, me lo daría. Pero no es así su política de tratar a la gente. En ese sentido es liberal, te deja jugar tu partido. Puede decirte 'haz lo que querái, cámbialo entero si quieres’”.

¿Que esperas de los televidentes tras tu debut nocturno?
"Habrá gente decepcionada, otros que pensarán que lo hago mejor. Será como lo que pasa en la vida nomás, compadre: espero de todo. Sé que la gallada no va a salir a la calle a felicitarme, ni que me amenazarán de muerte. O sea, va haber un pequeño trauma. No es poco reemplazar a Paulsen. Es como remplazar a Borghi en Colo Colo".