Es chilena, estudia música en Inglaterra y está en Santiago para mostrar en vivo su primer disco,
Magdalenas para ti. Es es el ramito de Violeta: nueve canciones de pop melódico y electrónico que presentará este viernes 15 a la medianoche en el bar Gran Central de la capital.
David Ponce
Violeta migratoria: su segundo concierto de este año en Santiago da el viernes 15 la cantante, que pasa la mayor parte del año en Liverpool. "Mi vida es así, dual", define (foto: Paula Labra). |
En las últimas semanas en Santiago se ha dedicado a buscar a músicos que entrevistar para la investigación que prepara con miras a obtener un doctorado, pero este viernes 15 de junio la música va a ser ella misma. Violeta, cantante y autora de 24 años que ha sumado su nombre al pop electrónico local con su disco
Magdalenas para ti (2006), presentará sus canciones en vivo en el bar Gran Central de la capital, en un programa doble junto al emergente cantante y guitarrista Fernando Milagros.
Aunque su disco data de marzo del año pasado, éste es casi un debut en vivo. "He hecho dos conciertos en Santiago", cuenta, días antes de esta tercera fecha. La primera fue en 2006 en la Sala SCD y la más reciente fue el 22 de marzo pasado en el bar El Living del Centro Arte Alameda, en compañía del músico Sebastián Mella, activo en el circuito electrónico con el nombre de Fantasna. La baja frecuencia se explica porque la cantante pasa la mayor parte del tiempo en Inglaterra, país en que Violeta Mayer vive y estudia desde 2002 y donde obtuvo una licenciatura en música popular en la Universidad de Liverpool.
"Fue hecho allá. Producido y mezclado en Liverpool, masterizado en Chile", precisa acerca de su disco, una colección de nueve canciones con melodías pop, bases electrónicas y títulos como "Si te vas", "Sirenas" o "Cotidiano". En Chile, Violeta es cercana a grupos locales como Brandon Teena o Niñoboy, con dos de cuyos integrantes dio ese primer concierto en 2006, pero ella había empezado a producir su disco un año antes en Liverpool, a mediados de 2005.
–Es un disco hecho en otro país. ¿Eso lo determina de alguna manera?
"Es que mi vida es así, dual. Chile y el extranjero. Sí tiene mucho que ver, porque estoy inmersa todo el rato en inglés. Todas esas canciones están escritas cuando yo ya estoy en el extranjero. Hay un par que quizás fueron escritas en Chile. Hay una que compuse en Grecia, ‘Sirenas’, cuando estuve de vacaciones, o pensando en esas vacaciones".
–¿Qué escuchabas antes de dejar Chile?
"De adolescente no escuché tanta música. Me acerqué a la música por las clases de canto, y luego empecé a escuchar Blur, The Verve y Pulp. Y el disco que primero me gusta es Pulp,
Different class, que me vuelvo adicta. Lo escuché el 96".
El periplo de Violeta parte a comienzos de 2001. "El primero del primero. Como ‘año nuevo, vida nueva’. Salí del colegio y a las dos semanas partí a Estados Unidos", recuerda. Tras cursar ocho meses de inglés en el estado de Washington, en agosto de 2001 empezó a estudiar música en un
college de California. "Ahí quise tener banda y escribir canciones. Y ya quería un sonido electrónico, pero no tenía idea de cómo. No sabía siquiera tocar guitarra, sólo sabía cantar. Aspiraba a esta cosa como media Björk, de
Debut, pero tenía que aprender un lenguaje que no dominaba".
–¿Hiciste un disco electrónico no porque fuera más fácil que armar un grupo, sino porque te gusta el sonido?
"De todas maneras. Estoy bien feliz con eso. Igual creo que va a ir cambiando, me gustaría llevarlo a algo un poquito menos pop. La mayoría de esas canciones están concebidas en una guitarra de palo y tienen arreglos electrónicos. Porque la guitarra de palo, aunque no toco muy bien, es más orgánica, más intuitiva, vas cantando encima de los acordes".
Luego de una semanas en Chile, Violeta planea volver a Liverpool, donde debe terminar su posgrado y donde además formó un grupo llamado Disquería con el que grabó canciones como "Us" y "Sólo extraños", audibles en su sitio web. "‘Sólo extraños’ es una canción en castellano que tocaba con esa banda y no me me importaba, igual cantaba en castellano en Inglaterra", recuerda. "Pero de todos modos tienes que hacer cosas en inglés, para que la gente no pierda la conexión".
–A propósito de Liverpool, después de los Beatles ¿qué grupo de allá es más importante en la ciudad? ¿Alguien se acuerda de Echo & the Bunnymen?
"¿Echo…? No. Pero The La’s a veces salen. Todavía tocan ‘There she goes’. Y ahora en Liverpool igual hay una escena bien vibrante. Está por ejemplo The Zutons, pasean por ahí, van a los carretes. The Coral, también. The Zutons y y The Coral están en el mismo sello. Está Ladytron, los dos hombres de Ladytron. Es que Liverpool es un pequeño pueblo con alma de ciudad. Entonces uno ve a esta gente. De hecho estos de Ladytron invitaron a Pánico a tocar a un local que ex extremadamente alternativo y fashion. Estuvo choro y fue mucha gente".