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Isabel Aldunate: "Valparaíso vals debería ser presentada en el puerto"

La artista manifiesta su deseo de que el público porteño pueda conocer este homenaje artístico a Valparaíso que el Ballet Nacional Chileno está presentando en la capital.

22 de Junio de 2007 | 17:12 | El Mercurio Online

SANTIAGO.- “Valparaíso Vals” se ha convertido en una obra emblemática sobre el puerto, una invitación a contemplar la magia que está presente en sus cerros, su mar y su gente a través de una acertada combinación de música popular, poesía y danza  El espectáculo coreográfico, de Gigi Caciuleanu,  con canciones populares sobre Valparaíso interpretadas en vivo por Isabel Aldunate  ha sido elogiado por el público y la crítica, lo que motivó la realización de una nueva Temporada de funciones en el Teatro Universidad de Chile, donde estará en cartelera los días 29 y 30 de junio a las 19:30 horas.

La obra no ha sido apreciada aún por el público del puerto en forma completa ya que solamente se mostraron extractos en la inauguración de los Carnavales Culturales el año pasado y hasta la fecha no se ha concretado el deseo de los artistas que dan vida a este espectáculo de ofrecerlo en el lugar que lo inspira.

“Resulta extraño que Valparaíso Vals, este homenaje que hemos hecho al puerto desde lo más profundo del corazón, no se haya presentado nunca en Valparaíso. Es increíble en verdad, porque pusimos todo el amor, dedicación y nuestro tremendo respeto por el patrimonio cultural al hacer esta antología chilena de canciones en esta maravillosa creación de Gigi en homenaje a este puerto. "¡Si Valparaíso Vals es Puro Chile!", afirma Aldunate. Una de las grandes voces del movimiento del Canto Nuevo, Isabel Aldunate está involucrada a fondo en el espectáculo coreográfico, un trabajo que le apasiona y, confiesa, en cierto modo  le ha revolucionado la vida, dividida entre su trabajo profesional como abogada y los escenarios.
 
Soñó con convertirse en bailarina, pero resultó siendo cantante y aunque el baile quedó sólo en su corazón debido a una lesión en la columna, Isabel nunca dejó de estar cerca de la danza.Por eso, cuando Gigi Caciuleanu la escuchó cantar en el Mesón Nerudiano y la eligió para que formara parte de “Valparaíso Vals” junto al BANCH, para ella fue la concreción de un sueño.
 
Desde que inició su carrera en 1977, el público reconoció su talento en inolvidables escenarios como el Café del Cerro, donde dio a conocer un repertorio profundo y comprometido en el que se hermanaban la música y la poesía hispanoamericana.  También fue reconocida en países como Argentina, Perú, México, Estados Unidos, Canadá, Francia, Italia, España, Alemania y Suecia.

Sinergia fantástica 

Para ella él éxito de Valparaíso Vals tiene que ver con “una fantástica sinergia de expresiones artísticas. “En primer lugar está el genio de los poetas y músicos traducido en la canciones que elegí para cantar;  luego están a los maravillosos bailarines del Banch, con su talento y calidad humana conmovedores, y luego Gigi, el mago, con su genio planetario capaz de crear esta tercera o cuarta dimensión en la escala de la creación. Cuando el mundo de la poesía, la música y la danza son transportados a esta dimensión diferente, se produce la magia. Entonces, el  alma de “Valparaíso Vals” es Gigi, sólo él era capaz de lograr esta conjunción increíble”.

La cantante, que desarrolló por años su carrera en el underground y se convirtió en una de las figuras emblemáticas del Canto Nuevo en los ’80, confiesa que participar en  este espectáculo coreográfico provocó un cambio profundo y sutil en ella.

“Una aureola mágica rodeó mi corazón a partir de entonces y aún continúa conmigo. No soy la misma después de esta experiencia, que me ha transformado y enseñado muchas cosas. Lo necesitaba en forma urgente. En realidad, siempre he caminado bien solitaria desde el punto de vista artístico, guiada por mi intuición, responsable para bien y para mal de mis errores y aciertos. En mis comienzos tuve el apoyo y la guía fundamental de quien era el director de mi sello, el Sello Alerce, Ricardo García, pero él nos dejó muy pronto y por Dios que me hecho falta. Hasta ahora nunca tuve un director de escena, un  director musical, un manager, nada…"

"Entonces, sólo a partir de Valparaíso Vals tuve la oportunidad de aprender, gracias a Gigi, la concepción de un espectáculo, la disciplina, la dinámica en la cual desaparece la Isabel con sus miedos y entusiasmos,  para ser parte de un espectáculo riguroso, donde cada detalle se ha diseñado con profesionalismo, desde principio a fin”. 

Valparaíso Vals
Ballet Nacional Chileno, BANCH.
22, 23, 29 y 30 de junio, a las 19:30 horas
Teatro Universidad de Chile, Providencia 043, Metro Baquedano, fono: 6345295
Entradas: Desde $ 4.000 a $ 8.000 público general y desde $ 1.500 a
$ 1.000  estudiantes. También venta a a través del sistema feriaticket

“Para mí el puerto es un lugar mágico que conocí y recorrí durante mi juventud: era un subir y  bajar cerros, recorrer esas calles infinitas que te llevan a todas partes y a ninguna, los corredores misteriosos, la vista del puerto desde los balcones, los barcos, el olor de Valparaíso, el fuerte olor de sus maderos antiguos”, manifiesta y aunque nunca ha vivido allí, artísticamente ha sido su  lugar favorito.

“Todos los 8 de marzo (Día Internacional de la Mujer) estaba allí cantando, fueron emociones muy fuertes las que experimenté. Hoy sigo con ese amor profundo por el puerto. En diciembre pasado, cuando con el Banch inauguramos los últimos Carnavales Culturales con un extracto de “Valparaíso Vals”, al día siguiente desperté en el Cerro Alegre lleno de sol, caminé y caminé por los cerros, entre volantines y aire limpio, bajé a la playa, y me pasó algo muy fuerte: sentí que quería vivir ahí,  que Santiago se ha convertido en un lugar que me angustia.

"Tenemos al alcance de la mano lugares que son paraísos y sin embargo seguimos sufriendo el caos y la contaminación. Y si hay algo que se puede llamar paraíso es este puerto, bellísimo, su gente, sus bares, sus cafés, los pelícanos que están a cinco minutos de tu casa en la playa, el  montón de artistas que están haciendo cosas, pero nadie los da a conocer. Siento que hay mucha ceguera, que no valoramos lo que realmente debiéramos”, sostiene.
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