Tras su debut con Come astronautas (1998), el dúo electrónico que integran Sergio Lagos y Rodrigo Castro arma con su nuevo volumen una definitiva fiesta, todos los ambientes incluidos.
A partir de la elegante rutina disco inicial, el grupo chileno crea ambientes de funk setentero, episodios de ese ligero pulso conocido como drum n bass y hasta pasajes de reposadas guitarras si hay que parar de bailar: estimulante biodiversidad marciana.
David Ponce