En una época donde los recursos son escasos y los esfuerzos cada vez más infructuosos, extraña ver en el mercado un disco tan insulso como este. Una placa que, con pretensión de universalidad, reúne a todos los artistas nominados a los premios Billboard a la música latina en un compilado aburrido.
Porque salvo Christián Castro ("Por amarte así"), Luis Miguel ("La bikina") y Paulina Rubio ("Lo haré por ti"), el resto de los nombres pueden ser muy famosos en la Ocean Drive, allá en Miami, pero resultan absolutamente ajenos a nuestra cultura y gustos musicales.
Hablamos de Gisselle, Gilberto Santa Rosa y Tito Rojas. Incluso gente más conocida, como Carlos Vives o los espantosos Son by four (que aparecen con su versión salsera de "A puro dolor"), no hace más que ayudar al rechazo. Sí buscamos salsa o cumbia, un grandes éxitos de Tommy Rey resulta mucho más apetecible. Está claro. Los premios Billboard sólo funcionan bien entre palmeras y la calle 8.
Pablo Márquez