Bono, durante el paso de Elevation Tour por Nueva York, puso las cosas en su lugar: el líder de U2 dedicó uno de sus conciertos a la memoria del fallecido Joey Ramone, la voz y alma de uno de los grupos más importantes de la música popular.
Sencillos, rudos, explosivos, el punk en bruto de los Ramones se convirtió en toda una leyenda. Un legado que, en algo más de dos horas y media, se compila de manera exhaustiva en este reeditado disco doble (lanzado en Estados Unidos hace un par de años).
Aquí está todo. Desde la incendiaria Blitzkrieg bop hasta la reposada Poison heart, pasando por clásicos como I wanna be sedated, Sheena is a punk rocker y la indispensable Physo therapy. A tu salud, Joey.
Pablo Márquez