Artista, productora, escritora, arreglista, rapera, cantante, ejecutiva, dice de sí misma - en un arranque de narcisismo- Missy Misdemeanor Elliot. Y es cierto: si de diversidad se trata, su propuesta tiene muchas caras.
Arrancando desde el hip-hop roza el pop, rescata las inigualables voces femeninas del soul y explora en áreas étnicas, generando una propuesta blanda en lo musical y abierta a lo comercial, aunque no por eso de mala calidad.
En el menú se ofrece, además, voces de compañía: Eve, en 4 my people, o Ludacris, en One minute man. Un problema: En Get ur freak on, quizá la mejor canción del disco, se extraña a Nelly Furtado.
Jimena Villegas