Dos elementos técnicos llaman la atención en este disco: que salga justo cuando Javiera y su banda están rompiendo las listas con su nostálgico nuevo disco, "AM", y que en los créditos no se nombre a su banda de siempre, Los Imposibles. Son tácticas de la industria, es cierto, pero las estrategias comerciales no siempre son claras y orientadoras para el consumo.
Así y todo, este álbum tiene la gracia de mostrarnos un lado hasta ahora desconocido en el medio local: el mundo de las remezclas, de las primeras versiones de las canciones, de las improvisaciones y de los descartes.
Ojo. Este no es un disco de grandes éxitos. Son las canciones más conocidas de la cantante pero entregadas en versiones hasta ahora inéditas, con cambios de ritmos o quiebres hasta ahora ocultos (salvo "El albertío" y un puñado de canciones de su álbum "La suerte", que aparecen tal como las conocemos).
Sólo para fanáticos: la críptica versión de "Amargo", la remezcla de "Alacrán" ( hecha por su propio autor, Alvaro Henríquez) y las primeras tomas (los llamados demo) de "Compromiso".
Pablo Márquez
