Sólo la fuerte guitarra de "The night that Minnie Timperley died", una de las canciones que los fans más han votado en internet para que se convierta en el próximo single, rompe la quietud melódica de la nueva y esperada entrega de Pulp.
Porque el sucesor de "This is hardcore", su mega éxito de 1998, es un collage de timbres, detalles y sutilezas firmadas por los hombres a cargo de Jarvis Cocker.
Un disco ameno, cantado a ratos en tonos bajos cercanos al susurro ("Wickerman", "Weeds II"), aliado de la tensión dramática ("Weeds"), pero más bien inofensivo.
Advertencia para los fanáticos: aquí no hay mucho que se parezca al delirio de "Common people" o "Disco 2000", por nombrar los éxitos más pop de los ingleses, sino ejercicios más plácidos ("The trees"), nostálgicos ("Roadkill") e incluso campestres hasta la caricatura (con pajaritos trinando en "The birds in your garden").
Y si hay que elegir, no hay duda: por título y por estructura, la simpleza de "Bad cover version" se lleva todos los aplausos.
Pablo Márquez.
