Fleetwood Mac ha sido un conjunto camaleónico. Lo que hoy podría considerarse como la encarnación misma del sonido rock pop adulto, lo que se conoce como el Adult Oriented Rock del canal VH1, nació a fines de los setenta como una banda de blues sicodélico. Su trayectoria ha sido también, cuando menos, accidentada, marcada por deserciones, disoluciones y reuniones repentinas; incluso desde aquellos años lisérgicos, cuando dos de sus miembros fundadores, Peter Green y Jeremy Spencer, tuvieron que dejar su puesto por abuso del ácido, después de dar evidentes señales de locura. Tras varias décadas de recorrido, Fleetwood Mac ha lanzado una nueva selección de grandes éxitos con el propósito de hacer una selección definitiva y el añadido de anunciar una nueva reencarnación. Al parecer el problema de esta banda que no parece funcionar muy bien en términos personales, es que logra hacer discos que pueden venderse y sonar muy bien. "The Very Best of Fleetwood Mac", como para distinguirse de selecciones anteriores más modestas en sus intenciones, es precisamente una muestra de lo bien que sonaba Fleetwood Mac a pesar de todas sus trizaduras internas. En su versión de un solo disco compacto - ya que la doble es diferente- esta selección hace un buen resumen de la trayectoria del conjunto y, como puede esperarse, tratándose de una antología de lo mejor de un grupo que supo colocarse bien arriba en los listados de popularidad, el material escogido aquí está bien probado y no va a decepcionar a nadie.
La selección se centra particularmente en los años posteriores al ingreso al grupo de Lindsey Buckingham y Stevie Nicks, quienes aportaron al grupo su característico sonido de soft rock prolijo, el mismo que hizo eclosión con la publicación del célebre disco "Rumours" en 1977, uno de los álbumes más vendidos en la historia de la música, y que consolidó la enorme popularidad del conjunto. Sin embargo, hay también dos buenas muestras del trabajo prehistórico del conjunto, cuando la banda se encontraba bajo la influencia de Peter Green, se trata de la célebre "Black Magic Woman", que para más de algún incauto parecerá como un cover, y la melancólica "Albatross". Lo suficiente como para atraer la atención sobre el material antiguo del grupo y no confundir al público con tantas diferencias de estilo.
M. S. Q.
