Las "bootleg series" de Dylan son grabaciones formadas por canciones descartadas, lados b, y versiones en vivo inéditas. De alguna forma son la versión oficial y completa del archivo Dylan, que siempre ha sido saqueado por piratas y fánaticos a lo largo de años. Los dos discos que forman "Bob Dylan live 1975" son la tercera entrega que hace Columbia/Legacy de estas arcas, las dos anteriores fueron la famosa caja triple y la segunda el legendario concierto del Royal Albert Hall en 1966. Tal como ha sucedido con las series anteriores se trata de material inédito que ha estado disponible parcialmente en el extenso pero inaccesible mercado negro de Dylan. Del mismo modo estas grabaciones son también una revelación sorprendente.
Esta quinta entrega de las "Bootleg series" contiene los grandes momentos de los conciertos de lo que Dylan llamó la "Rolling Thunder Revue". Esta fue una gira multitudinaria por Estados Unidos que Dylan y una serie de músicos ilustres emprendieron en un espíritu carnavalesco y gitano, inmediatamente después de grabar "Desire". La idea de Dylan para esta gira era armar una especie de circo itinerante o una especie de espectáculo de variedades del oeste norteamericano con una banda de músicos en la que él fuera un número más y donde hubiera un espíritu de improvisación y desarreglo. La "Rolling Thunder" llegaba de improviso con una serie de luminarias del ambiente rock folk hippy de los setenta como Joan Baez, Rambling Jack Elliot, Roger McGuinn, Joni Mitchell y otros de la especie. Después que la audiencia había sido entusiasmada por parte del elenco, aparecía Dylan con la cara pintada como un saltimbanqui. El espectáculo duraba varias horas.
Las grabaciones de "Bob Dylan live 1975", que no corresponden a una única presentación de la gira, son una prueba clara de cómo Dylan siempre ha considerado sus canciones como meras pruebas o "blue prints" y no como algo definitivo. Aquí cambia letras y música haciendo que parte de su repertorio más trillado como "A Hard Rain's a-Gonna Fall", "It Ain't Me, Babe" y otras canciones aparezcan renovadas de forma difícilmente reconocible e interpretadas por una banda de lujo.
Cualquier aficionado a Dylan que se precie tendrá al menos que darles una pasada a estas grabaciones excelentes.
