) "Wabash" (C.Adderley), 2) "Jimmy Rowles" (M.Moore), 3) "Mr. Brubeck" (M.Moore), 4) "My Shining Hour" (J.Mercer/H.Arlen), 5) "Cave Of The Heart: For Bill Evans" (M.Moore), 6) "Cherokee" (R.Noble), 7) "Yesterdays" (O.Harbach/J.Kern), 8) "Triple Play" (B.Strayhorn), 9) "Ballade For Very Tired And Very Sad Lotus Eaters" (B.Strayhorn), 10) "If Dreams Come True" (I.Mills/E.Sampson/B.Goodman), 11) "Shorter Tale: For Wayne Shorter" (M.Moore), 12) "Nardis" (M.Davis), 13) "Tom: For Antonio Carlos Jobim" (M.Moore), 14) "Waltz New" (J.Hall), 15) "Herbie Nichols" (M.Moore). Grabaciones realizadas en Nueva York el 3 y 4 de abril de 2001 por Ken Peplowski en clarinete (en 2, 4, 5, 9, 10 y 14) y saxo tenor (en 1, 3, 6, 8, 11, 12, 13 y 15), Michael Moore en contrabajo (todas menos 2) y piano (sólo en 2) y Tom Melito en batería (todas menos 2 y 5).
La combinación de clarinete o saxo con contrabajo y batería, si bien no constituye una excepción, no es muy usual en el jazz, pues carece de un instrumento como piano o guitarra que habitualmente suministra los acordes sobre los cuales cada solista construye sus variaciones. Este segundo volumen de "The History of Jazz" - igual que el primero (que fue grabado por este mismo trío en 1998)- representa sin embargo un notable logro artístico, logro que no sólo es debido a la gran calidad de los ejecutantes, sino que se debe también a lo poco convencional de su instrumentación. La aridez que resulta de la falta de acordes consigue producir mayor claridad y mayor libertad de las líneas melódicas y estos tres virtuosos sacan excelente partido de esa oportunidad. A diferencia del volumen 1, que sólo contenía "standards", el álbum que hoy comentamos mezcla "standards" con interesantes composiciones de Moore dedicadas a algunos músicos que él admira. El contrabajista introduce "Yesterdays" ejecutando con arco el comienzo de una suite para cello de Juan Sebastián Bach. Hay que notar también que "Triple Play" es un tradicional "blues" de doce compases, mientras que "Waltz New" está basado en la conocida progresión armónica de "Someday My Prince Will Come". En efecto, el CD que hoy comentamos abarca un espectro musical muy ecléctico, pero la personalidad, la cultura y el buen gusto de los artistas involucrados consiguen aquí un concepto que, además de ser unitario y consistente, no deja de ser rigurosamente jazzístico.
J. Hosiasson
