Grabado en vivo en octubre pasado, durante la glamorosa presentación del inglés en el Madison Square Garden de Nueva York, este nuevo disco de Elton John cumple con todos los requisitos para convertirse en indispensable.
Primero, por lo homogéneo y magnético del repertorio incluido en esta placa de 15 cortes. Un listado que abarca desde su época más cruda (Rocket man), pasando por sus clásicos melódicos (Candle in the wind), sus más grandes aciertos rítmicos (Crocodile rock) y un par de joyas (Bennie & The Jets, Your song).
Eso, más la presencia de algunos invitados, entre los que destacan Kiki Dee (Dont go breaking my heart), Bryan Adams (Sad songs) y Mary J. Blige (I guess thats why they call it the blues), todas voces sumisas ante el siempre notable protagonismo de Elton John.
Buen sonido, una energía que se trasluce por los parlantes y un pulso bien matizado entre baladas y esfuerzos rockeros, hacen de este One night only un grandes éxitos interesante. La transición justa para que sir Elton John tome un respiro y vuelva con material nuevo. Como debe ser.
Pablo Márquez F.
