Wilhelm Stenhammar nació en Estocolmo en 1871 y murió en 1927. Provenía de una familia muy cultivada y se asegura que por el lado materno descendía del rey Gustavo Vasa. Viajó mucho por Europa, especialmente por Alemania, y fue admirador de Liszt, Wagner, Bruckner y, particularmente, de Brahms. Ahora le ha llegado el tiempo de su resurrección en discos (hay una aplaudida grabación en dos compactos DG, que no conocemos) y a juzgar por ésta es muy merecido su redescubrimiento. La sinfonía, en cuatro movimientos, es original y está inspirada en danzas y cantos populares; el último es una especie de gran fuga. "Excelsior!" es una obertura sinfónica que lleva como lema en la partitura una frase de la primera parte del "Fausto" de Goethe, y fue dirigida por Artur Nikisch, nada menos. Tiene un rápido y apasionado comienzo, mientras más tarde va cambiando el ritmo. La orquesta es un buen conjunto y su director demuestra cariño por las obras. Grabado en 1996. Un disco compacto Naxos. DDD.