Reise, Reise
En su cuarta producción, la agrupación alemana mantiene la misma línea musical de sus discos anteriores, consolidando un estilo propio donde sobresalen
riffs explosivos y reiterativos, coros, sintetizadores y letras punzantes.
Con sus composiciones cantadas en alemán y su particular sonido industrial, la propuesta musical de Rammstein no es fácil de digerir. Es del tipo de música que se odia o se ama, pero que definitivamente llama la atención y no deja indiferente a nadie. Lo cierto es que el conjunto germano se ha hecho muy popular en el último tiempo, ya que es cada vez más frecuente escuchar algunos de sus temas como cortina musical en un programa de televisión o radial. Y aunque muchas personas no conozcan el grupo, es muy probable que se hayan preguntado más de alguna vez a quién pertenecía aquel demoledor sonido.
Esa misma potencia sonora se percibe desde un principio en
Reise Reise con el
track homónimo que golpea directamente en la vena. Lo mismo ocurre con el corte siguiente, "Mein Teil", que con sus guitarras afiladas y entrecortadas hacen pensar en un disco colmado de energía y brutalidad. Sin embargo, luego de esos dos excelentes ejemplos iniciales, el disco pierde un poco la fuerza y surgen temas más tranquilos como "Dalai Lama", en el que predomina un estribillo con piano y una conjunción de voces suaves, o "Los", que incorpora
riffs acústicos.
El primer single, "Mein Teil", relata uno de los episodios más escabrosos ocurridos en los últimos años en Alemania: la historia de Armin Meiwes, más conocido como el "Caníbal de Rotemburgo", quien puso un anuncio en el periódico para buscar a una persona a quien devorar. Un relato morboso, pero interpretado magistralmente por estos seis músicos alemanes que gustan de escarbar en los actos más oscuros de la humanidad.
En "Amerika", el segundo sencillo del álbum, el grupo habla con ironía de la superpotencia, que ha invadido al mundo con sus "maravillosos" productos como la Coca Cola, el ratón Mickey y los sostenes Wonderbra. (
…We're all living in America / America is wonderful… We're all living in America / Coca-Cola, Wonderbra… ). En general las letras de las composiciones hablan sobre tópicos básicos de la sociedad como las el consumo, el sexo, el romanticismo, el erotismo y la ira, entre otros.
Musicalmente, hay cortes que difieren bastante del sonido tradicional de Rammstein como "Moskau", que incorpora la voz femenina de Viktoria Fersh, quien le entrega mucha frescura y energía positiva a la canción. Muy distinto a la típica atmósfera lúgubre de otras canciones del disco como "Morgenstern" y "Stein um stein", donde sobresalen coros épicos y un sonido más oscuro y gótico. También "Keine Lust", es llamativa con su
riff entrecortado que recuerda mucho a "The Beautiful People" de Marilyn Manson. Sorprende el inesperado cambio de ritmo en el medio, producto de la introducción de unos efectos con sintetizador muy interesantes.
Al final dos hermosas baladas, "Ohne dich" y "Amour", que son cantada con mucho sentimiento por Till Lindeman. Hay punteos de guitarra muy melódicos y como siempre el teclado aporta su cuota de dramatismo adicional. En la última composición, la voz de Till varia de los susurros a un tono impresionantemente grave. Su capacidad vocal impresiona durante todo el disco. Un final que definitivamente refleja el estilo más bien pausado que tiene este disco en relación con sus tres antecesores, que desbordaban adrenalina y brutalidad.
Nicole van Baal F.
Rammstein "Reise, Reise" (2004, Universal)
1. Reise, Reise, 2. Mein Teil, 3. Dalai Lama, 4. Keine Lust, 5. Los, 6. Amerika, 7. Moskau, 8. Morgenstern, 9. Stein um Stein, 10. Ohne dich, 11. Amour.
Duración: 47:47
Intérpretes: Till Lindemann (voz), Paul Landers (guitarra), Richard Kruspe-Bernstein (guitarra), Christoph Schneider (batería), Christian Lorenz (teclados y piano) y Oliver Riedel (bajo).
Producción: Jacob Hellner y Rammstein. |
