EMOLTV

Minimum - maximum

17 de Agosto de 2007 | 01:14 |
Décadas después de que las primeras calculadoras de bolsillo invadieran el mundo en los años ’70 con sus botones de colores y números de barras verdes, y llevaran la tecnología al maletín y al bolsillo del hombre de negocios moderno, Kraftwerk llegaron en noviembre de 2004 a dar un concierto en Santiago y tocaron una canción llamada "Pocket calculator", tal como suena en el nuevo disco en vivo del grupo alemán. No sólo fue un recuerdo ni uno de los shows memorables del año, sino también una muestra de la edad que hoy, cuando el celular multifuncional ya está jubilando a la palm, tienen estos pioneros de la época de la calculadora.

Su música a menudo consiste en esa cita a la técnica pasada de moda por medio de la alta tecnología actual, y escucharla es asistir a los inicios de un movimiento, cuando en los años ’70 el vocablo tecno sólo remitía a unos grandilocuentes Tangerine Dream o a precursores como la Yellow Magnetic Orchestra y Kraftwerk. Por efecto de una producción brillante, el sonido es límpido, perfecto, casi esterilizado en su nitidez, y el resultado tiene la simplicidad de lo fundamental. Las fuentes son electrónicas, pero los ritmos son bailables y emulan el juego entre caja, bombo y platillos de una batería tradicional como ocurría en toda la primera generación tecnopop de los ’80. Son armonías convencionales, timbres cristalinos, estructuras de canciones, y letras y melodías en "The model", "Neon lights" o "Autobahn", un estándar del grupo. Hasta la puesta en escena, replicada en la portada del CD, remite a la idea conservadora de cuatro ejecutantes frente a sus teclados.

Los contenidos están poblados de alusiones a esa creencia en un confort determinado por la técnica. En manos de Kraftwerk, una carretera o un tren expreso europeo remiten a esa idea de modernidad tanto como los adelantos de la era cibernética que desfilan aquí entre robots, hombres máquina, electrocardiogramas, química, computadoras personales, calculadoras portátiles y aerodinámica. La contrapartida de actualidad está en la edición de estas 22 canciones tocadas sobre todo en la porción europea del tour, en Varsovia, Riga, Moscú, París, Berlín, Londres y Budapest, además de Tokyo y San Francisco. Y es llamativo ver cómo reaccionan ante "Pocket calculator", por ejemplo, la circunspecta audiencia moscovita y la animada concurrencia japonesa que en Tokyo canta a viva voz la misma canción, titulada "Dentaku". Ayer fue tecnología, hoy es hibridación cultural: Kraftwerk siempre está al día.

Es aun más llamativo ver lo mucho que músicos, productores y DJs del mundo deben a este grupo. Todos aprendieron algo. Todos: el tecnopop, después llamado synth pop, de Yello, Soft Cell, New Order o Depeche Mode en los ’80; el pop robótico de Devo, el primer tecno industrial de Art of Noise, los pioneros techno de Detroit como Juan Atkins o Kevin Saunderson, los DJs de música house o trance. Esto es Kraftwerk: la matriz del robot.

David Ponce

Kraftwerk "Minimum - maximum" (2005, EMI).

Disco uno. 1. The man-machine. 2. Planet of visions. 3. Tour de France etape 1. 4. Chrono. 5. Tour de France etape 2. 6. Vitamine. 7. Tour de France. 8. Autobahn. 9. The model. 10. Neon lights. Disco dos. 1 Radioactivity. 2 Trans Europe express. 3. Metal on metal. 4. Numbers. 5. Computer world. 6. Home computer. 7. Pocket calculator. 8. Dentaku. 9. The robots. 10. Elektro kardiogram. 11. Aero dinamik. 12 Music non stop.

Músicos: Ralf Hütter, Florian Schneider, Fritz Hilpert, Henning Schmitz (teclados y programaciones).

Producción: Kling Klang.

Duración: 54’50’’ + 65’52’’.

www.kraftwerk.com
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?