Por mucho que se nos repita que éste es un "súpergrupo" —como antes lo fue, por ejemplo, Travelling Wilburies—, el único rostro reconocible en Raconteurs es el de Jack White, cerebro emblemático de la reciente reformulación del rock-blues estadounidense gracias al trabajo que viene realizando con su ex esposa en The White Stripes y en proyectos particulares de producción (como el estupendo álbum que hace dos años le grabó a la cantante country Loretta Lynn). A White lo acompañan en este grupo circunstancial un cantautor de cierto prestigio en los circuitos universitarios del norte de Estados Unidos (Brendan Benson) y dos integrantes de un grupo garage llamado The Greenhornes. Y aunque sus socios tuviesen un talento que excediera el suyo, es más cómodo creer que la dirección de The Raconteurs la da la visión privilegiada de White, aquel pálido cantautor que siempre trabaja vestido de rojo y blanco. Según sus propias declaraciones, si los White Stripes son un grupo que busca "seguir las reglas, The Raconteurs se trata, para mí, de romperlas".
Broken boy soldiers se repite en estos momentos en las listas internacionales con lo mejor del 2006, y es lógico que así sea. Éste es un disco de rock lleno de ganchos melódicos, de canciones que se adhieren rápidamente al oído, letras inteligentes y arreglos justos. La voz principal, que es siempre la de White, juega en armonías bien construidas con la de Benson, según una lógica de clara deuda al rock clásico tipo Cream o Led Zeppelin. Ahí están "Hands", un tema que huele a desierto de Nevada y a melenas ondulantes frente a un amplificador, o "Store bought bones", no más lejos de la técnica de Jimmy Page que "Yellow sun" del álbum blanco de los Beatles. La graciosa foto de carátula se asocia a entrevistas en las que este grupo insiste en la condición "improvisada" de una banda armada como un divertimento. Pero
Broken boy soldiers es el disco de mentes ocurrentes que se toman muy en serio la música y que aunque dejen a este álbum como único signo testimonial de su unión fugaz, lo han hecho con altura. Raconteurs es la bengala más brillante de un 2006 que ha demostrado que, por mucho que se reformule, el rock no puede desdeñar por completo sus raíces.
Cristina Hynde
The Raconteurs "Broken boy soldiers" (2006, XL).
1. Steady as she goes. 2. Hands. 3. Broken boy soldier. 4. Intimate secretary. 5. Together. 6. Level. 7. Store bought bones. 8. Yellow sun. 9. Call it a day. 10. Blue veins.
Integrantes: Jack White (voz, guitarra, sintetizador), Brendan Benson (guitarra, voz, teclado), Jack Lawrence (bajo), Patrick Keeler (batería y percusión).
Producción: Jack White, Brendan Benson.
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