LAS VEGAS.- Una Britney Spears distraída y fuera de forma ofreció la que está destinada a ser la más comentada actuación en el acto de entrega de los premios MTV a los videos musicales, pero no por buenas razones.
Iniciando el espectáculo el domingo con su nueva canción "Gimme More", Spears se vio confusa y poco preparada, a la manera de sus aventuras de tabloide en las calles de Los Angeles.
Spears ejecutó perezosamente sus coreografías, con muy poco entusiasmo. Parecía como si se hubiese olvidado del arte del doblaje y, quizás, lo que es más imperdonable dada su reputación, se le vio vergonzosamente fuera de forma.
Incluso las celebridades en la audiencia parecieron desconcertadas. 50 Cent miró a Spears con una expresión confusa; Diddy, su nuevo amigo, se vio sin expresión.
MTV estaba esperando reinventar la ceremonia de premios, luego de sufrir malas críticas y una baja en la teleaudiencia en años recientes, y movió la ceremonia este año al Palms Casino, en Las Vegas, acortó el formato de tres a dos horas y cambió eL enfoque de los premios a la música.
La acción principal ocurrirá en cuatro suites en el hotel: una presentada por Justin Timberlake y Timbaland, otra por Kanye West, la tercera por los Foo Fighters y la última por Fall Out Boy, con cámaras trasmitiendo esas actuaciones y las fiestas correspondientes a lo largo de la noche.
"El sentimiento general fue: ¿qué podemos hacer para darle fuerza a este espectáculo, porque hay demasiados programas de premios en estos momentos?" afirmó el productor ejecutivo Jesse Ignjatovic. "Todo el mundo sintió que era hora de arriesgarse y hacer cosas realmente diferentes".