TORONTO.- El prolífico realizador británico Richard Attenborough estrena hoy en el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) su último film, "Closing the Ring", pero a un día del cierre de la muestra la atención se concentra en las películas que quieren estar en los premios Oscar.
Desde hace años, Toronto se ha labrado fama como el festival en el que se presentan una gran parte de las películas que tienen aspiraciones a conseguir alguna de las estatuillas de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood.
Al principio fue una cuestión natural que el TIFF sirviese de trampolín para algunos filmes, pero desde hace ya algún tiempo los estudios se han esforzado por mantener la muestra de la ciudad canadiense como el punto de lanzamiento de sus candidaturas.
Este año ha sido incluso más evidente, con la avalancha de nombres que llegaron a Toronto en la primera mitad del festival para caminar por la alfombra roja del Roy Thomson Hall, la sala dedicada para los filmes del programa de Galas y que normalmente se reserva a grandes producciones con poderosos respaldos.
"Eastern Promises", de David Cronenberg, con Viggo Mortensen y Naomi Watts; "Reservation Road", de Terry George, con Joaquim Phoenix y Mark Ruffalo; "Rendition", de Gavin Hood, con Jake Gyllenhaal y Reese Witherspoon; "Michael Clayton", de Tony Gilroy, con George Clooney y Tom Wilkinson, son algunos ejemplos de Galas. Y de nombres que empiezan a sonar como candidatos a los Oscar.
Hoy le toca el turno de recorrer la alfombra roja a Attenborough junto con parte de sus actores, estrellas como Shirley MacLaine, Christopher Plummer, Mischa Barton o Neve Campbell.
En "Closing the Ring", el actor-director sitúa a MacLaine en el personaje de Ethel, la reciente viuda de un veterano de la Segunda Guerra Mundial y madre de una histérica Marie (Neve Campbell), que sobrevive, con la inestimable ayuda de alcohol, en una pequeña localidad de Estados Unidos.
Pero su vida se ve trastocada cuando Marie recibe una llamada de teléfono desde Irlanda del Norte, en la que se entera de que alguien ha encontrado un viejo anillo que pertenece a su madre.
La crítica no se ha apiadado de Attenborough. "¿En qué estaba pensando cuando (Attenborough) se apuntó a dirigir una historia tan lúgubre, sentimental e imposible?", se preguntaba la revista The Hollywood Reporter en un reciente comentario sobre el filme que calificaba la actuación de MacLaine como "agria y sin vida".
La segunda Gala del día también está reservada para un actor-director, en este caso la realizadora-actriz libanesa Nadine Labaki. La producción franco-libanesa "Caramel", su primer largometraje -en el que también actúa en compañía de Yasmine Al Masri, Joanna Moukarzel y Gisèle Aouad-, se sitúa en una peluquería de Beirut y narra la vida de cinco mujeres con vidas muy distintas.
Pero la atención por las películas que pueden jugar un papel en los Óscar no se limita a los filmes presentes en las Galas. Un buen ejemplo es "No Country for Old Men", el brutal thriller de los hermanos Joel y Ethan Coen, y que está interpretado en sus principales personajes por Javier Bardem, Tommy Lee Jones, Josh Brolin y Woody Harrelson.
Jones puede que se convierta en uno de los más nombrados en la próxima ceremonia de los Oscar gracias a su presencia en otra de las películas que mejores críticas ha despertado en Toronto, "In the Valley of Eliah".
El filme está dirigido por el canadiense Paul Haggis, quien ya ganó el año pasado la estatuilla de Mejor Película por "Crash", y se centra en la búsqueda del asesino de un veterano de Irak tras regresar a Estados Unidos.
Otra candidata puede ser "Into the Wild", del actor-director Sean Penn. Es una reflexión sobre lo que significa hoy en día ser un estadounidense a través de los ojos de un joven de clase media-alta, y se mantiene como uno de los filmes que mejores críticas ha recibido en el festival.