Óscar Amapola Silva (guitarra), Patricio Pato Silva (bajo), Rodrigo Silva (batería), Francisco Fico Silva (guitarra) y Claudio García (voz) son Los Miserables.
Foto: archivo de Los Miserables.Al principio la intención fue hacer un homenaje a la Cantata Santa María de Iquique (1970), el histórico disco con el que Quilapayún y Luis Advis conmemoraron la matanza obrera nortina de 1907, de la que justo este año se cumple un siglo. Pero el plan inicial no duró mucho.
-Vimos que hay tantos homenajes y no quisimos hacer uno más -explica Claudio García, el emblemático baterista y cantante de Los Miserables. El grupo rockero chileno se dedicó entonces a su propia "cantata", con canciones, relatos, sonido de rock y dedicada a la historia de las víctimas menos visibles de las violaciones a los derechos humanos en dictadura: los hijos de los exiliados y desaparecidos.
Lanzado el 11 de septiembre pasado, el disco se llama Luna, subtitulado "Una historia… de muchas vidas", y es el duodécimo de este prolífico grupo iniciado en el punk y el ska en 1990, en la capitalina comuna de La Cisterna. "Es un proyecto que teníamos guardado hace como diez años", agrega el cantante, "y ahora es el momento de hacerlo, porque hay tan pocas ideas, porque está tan light el país".
Los Miserables tienen en cambio muy cerca los ejemplos para emprender un disco así. Luna está dedicado a Karina Ibarra, una amiga del grupo e hija de exiliados políticos, y a Luciano Carrasco, el hijo del periodista José Carrasco, de la revista de oposición "Análisis", que fue asesinado por agentes de la CNI el 8 de septiembre de 1986 como represalia tras el atentado a Pinochet. Luciano Carrasco se suicidó el 11 de noviembre de 2002, al arrojarse a la vía del tren en Santiago, cuando tenía 31 años.
-Es la vida de varios amigos que han vivido esta situación -explica Claudio García-. Dedicamos el disco a Karina Ibarra, que ha vivido en carne viva el problema del exilio, de que hicieron desaparecer a su papá, de volver a un país en donde no se adaptaba. Con el Luciano hablé tres semanas antes de que se matara, estuvo hablando de lo triste que estaba, porque no se hacía justicia a su papá, que fue justamente una de las personas que fueron cambiando la historia.
-Los Miserables siempre han hecho rock contingente. ¿Buscaron otra forma de hacer un disco político?
-La diferencia fue hacer un disco más humano, no tanto político. Porque los que sufrieron fueron niños que ahora tienen treinta, cuarenta (años), y quedaron marcados, sin tener una tumba donde dejar una flor o sin recordar el rostro de su padre. Y se trata de acercar un poco esta historia, que fue cierta, a los que están más preocupados del reggaetón o de vestirse como pokemones.
-¿Cómo eligieron a un personaje llamado Luna como protagonista?
-Representa un montón de gente, pero basado en dos personas, y elegimos una niña porque siempre las historias son de héroes, como (en la película) Machuca. Que fuera mujer me parecía mejor y también más delicado.
-¿Hubo que documentarse para hacer un disco así?
-Sí, de hecho tuve que pedir un poco de ayuda, porque las cosas pueden ser diferentes a como las ve uno. Hablé con gente, recibí mucha ayuda de personas que están estudiando historia o teatro, y por ahí fue saliendo la historia más definida. Yo me dedico más a la temática y mis compañeros a la música. Y obviamente me basé en la Cantata Santa María para hacerlo. Es la base.
Con éxitos como "N.N." (1997), "Progreso" (1998), "Chow chow sen" (2001) o "El crack" (2003) entre muchos otros ya asegurados en su carrera, Los Miserables pretenden dar un giro con el repertorio del nuevo disco. "Cuando lo presentemos queremos hacerlo en teatros, en colegios, mostrarlo como una obra", dice el cantante. "De hecho podemos hacer una versión acústica del disco entero.
-¿Ya han presentado algunas canciones en público?
-Sí, está pensado no para que la gente se pare a bailar en el concierto, sino para que vea el show, con imágenes también. Aparte es para sacarnos el encasillamiento. No es que uno reniegue de ser lo que es, sino de salir de un circuito y mostrar que somos una banda de rock completa. Es difícil, porque las radios ya no están tocando esta música, porque si no tocas reggaetón no eres partícipe de ninguna escena, pero nuestra gente es súper fiel y ahí está.