Joaquín Cortés modelo 2007. El bailaor se presenta este miércoles en el Teatro Caupolicán con su séptima obra La Soledad.
EFESANTIAGO.- Después de seis años hoy regresó a Chile Joaquín Cortés, el “bailaor” gitano más famoso del mundo. A sus 38 años está de vuelta con su séptimo espectáculo, “La soledad”, y evitando hablar de sus polémicas personales (una ex asistente lo acusa de ser padre de su hijo y él lo ha negado).
Pero si hay algo que mantiene el bailarín cordobés son sus frases altaneras, esas que le han generado más críticas que aplausos entre los especialistas de la danza. Esta mañana, cuando le preguntaron en el Hotel Ritz acerca de su preocupación de masificar el flamenco con shows accesibles hasta para la señora de la casa, señaló:
“En mis 20 años de bailarín he hecho espectáculos masivos en plaza de toros, estadios... Si hay una cosa que he conseguido con el flamenco es un poco lo que hizo (Luciano) Pavarotti con la ópera... Yo he popularizado el flamenco con mi estilo de danza, lo hemos llevado a todo el mundo, a sitios muy grandes. Pienso que eso es bueno. Porque es una manera de llevarlo al pueblo”.
El nuevo espectáculo de Cortés se presenta este miércoles, a las 21 horas, en el Teatro Caupolicán (entradas en ticketmaster, desde $25.000 hasta $100.000). Wikén definió a “La Soledad” como un show que mezcla “el flamenco con el jazz y el rock y que ha conseguido críticas dispares”. Ello porque medios especializados la consideran la mejor puesta en escena del bailarín, mientras que "ABC" de España asegura que “ha bajado el nivel de calidad como bailarín. Su último espectáculo es más ruido que nueces”.
Cortés, por su parte, defendió el show en su encuentro con la prensa chilena y se mostró encantado de volver al país. “Ya era hora. Para mí siempre es un placer volver a un país donde creo que dejé un buen sabor de boca”.
Acerca del montaje, señaló que “La Soledad es una obra con la que llevamos dos años y pico dando vueltas por el mundo. La duración es de una hora y 45 minutos, que dependiendo de la improvisación se puede alargar a dos horas. El vestuario es de Jean Paul Gauthier, un maravilloso compañero que tenemos. La música es original, compuesta por Antonio Carbonel y yo mismo”.
El ex novio de Naomi Campbell -la modelo que golpeó a una nana chilena-, precisó que la obra que se verá este miércoles no es “un trabajo autobiográfico”, “sino que quería profundizar" en el concepto de forma más universal.
“Todos tenemos inseguridades, momentos buenos y malos. Es como el ying y el yang, el alto y el negro, el sí y el no. Son tantos momentos que depende de la persona. Pero independientemente, lo que intento es que a través del idioma universal, que es el movimiento, expresar un poquito lo que es la soledad; quizás es a mi manera, pero digo que no es un trabajo autobiográfico porque todos tenemos que aprender a convivir con la soledad... para algunos puede ser un drama y para otros, es maravillosa, porque puedes viajar contigo mismo y descubrir cosas”.
En cuanto a la puesta en escena, Cortés señaló que su espectáculo se divide en dos partes. “La primera es más contemporánea, más clásica y teatral, donde se ve a un hombre en una habitación, un poco enfrentándose a la soledad, aprendiendo a convivir con ella, enfrentando sus miedos e inseguridades... La segunda parte, es volver a mis orígenes, a mi tierra, soy gitano, y se muestra un poco como es una fiesta gitana, que quizás es lo que vosotros estáis más acostumbrado a ver de la parte del flamenco”.
Antes de retirarse del Ritz, Cortés insistió en que no quería hablar acerca de la paternidad que le atribuyen y se despidió de la prensa muy bien acompañado por una asistente rubia, con la que desapareció por un ascensor en dirección a la piscina del hotel.