Claudia Acuña editará su cuarto disco solista a través del sello Marsalis Musica, que dirige Branford Marsalis. El saxofonista además toca en dos piezas de este álbum.
El MercurioNo tiene nombre definitivo pero es muy probable que se llame Color de un sueño. Será el cuarto álbum de la cantante chilena que llegó a la capital planetaria del jazz en 1994. Ahí grabó música para el sello Verve y obtuvo su nombre a nivel mundial.
Y entre esas aventuras conoció a los hermanos Wynton y Branford Marsalis, parte de la generación conocida como los “jóvenes leones”, que recuperó la raíz del jazz acústico. Con Wynton Marsalis, Acuña trabajó en una grabación de su big band “y Branford me preguntó una vez si estaba en con algún sello y si quería unirme a Marsalis Music. Acepté”.
Además de editar títulos de esta familia de Nueva Orleans, El sello Marsalis Music incluye álbumes de Harry Connick Jr, Joey Calderazzo y Miguel Zenón. El propio Branford Marsalis anuncia en el sitio de la disquera el fichaje de la chilena: “Es largamente es reconocida como una de las voces emocional y técnicamente más convincentes en el mundo del jazz durante la década pasada”.
-Tu disco anterior, Luna (2004) ya tenía una canción propia. ¿Hay nuevas piezas de tu autoría?
-Escribí dos canciones:“Tulum” y “Home”. Es cierto, el trabajo de composición personal va in crescendo disco a disco. En los comienzos, en las grabaciones que hice con Verve,había música latinoamericana y canciones standards del jazz, pero hasta ahí no había incluido canciones mías.
-¿Qué línea sigue este cuarto disco propio?
-La prensa tiende a encasillarme en el jazz así como así. Pero yo digo que lo que hago es música propia y en ese sentido el disco será una extensión de Luna. Sigue habiendo una fusión importante de la raíz latinoamericana con el lenguaje del jazz, que es tan universal que puede ir a buiscar distinas músicas para reordenarla. Y siempre va a seguir creciendo.
-Branford Marsalis es un músico de jazz que seguramente conoce mucha música. ¿Conocía la música latinoamericana?
-No la conocía en profundidad. Uno siempre va a estar aprendiendo. A Víctor Jara y a Violeta Parra las conoció a través mío y quedó muy sorprendido. Él produjo y editará el disco, y también aparece tocando el saxofón en el bolero “Cuando vuelva a tu lado” y la canción de Violeta Parra “Run Run se fue pa’l norte”. Ésta ha sido mi mejor experiencia con un productor, porque además es músico y él entiende otro tipo de cosas. Branford Marsalis es un abecedario de la música.
Última estación sinfónica
Hoy a las 21:00 horas la cantante chilena radicada ahora en Nueva Jersey (pasó de Manhattan a Brooklyn y de ahí al lado oeste del Río Hudson) actuará en el Centro Cultural Estación Mapocho en la última estación del concierto “Violeta Parra Sinfónico”. La entrada es gratuita. Se deben retirar dos tickets por persona en las boleterías de la Estación Mapocho.
El concierto incluye doce canciones que Violeta Parra concibió para guitarra campesina y cantora popular, ahora orquetadas por el compositor Guillermo Rifo, a la cabeza de la Orquesta Sinfónica de Concepción.
-Por tu carrera original, uno sabe que te inspirabas en artistas como Abbey Lincoln o Frank Sinatra, pero no sospecha que la presencia de Violeta Parra sea tan contundente.
-A Violeta Parra la conocí en el coro y el grupo folclórico del colegio en Concepción. Fue una inspiración original para mí, porque yo veía que ella era una artista mujer capaz de crear una historia propia. Claro también hay una inocencia porque uno no sabe si es Violeta Parra o Frank Sinatra. Simplemente, le gusta la música. Pero a la larga es muy obvio: yo grabé "Gracias a la vida" (de Wind from the south, 2000) y "Volver a los 17" (de Rhythm of life, 2002). En Color de un sueño, si es que termina llamándose así, tendremos "Run Run se fue pal norte", con Branford Marsalis.