Beck fue el aperitivo de The Police

SANTIAGO.- Estadio aún sin llenar, última luz del atardecer, demasiados globos publicitarios y un rubio desgarbado quejándose de un corte de pelo del diablo.
 
"Devil's haircut" fue puntual, y dio inicio a un set de teloneo de casi una hora, al cabo del cual Santiago ya había escuchado --por primera vez en vivo-- éxitos internacionales como "New pollution", "Where is at" y la inconfundible "Loser".
 
El de Beck fue un precalentamiento de excepción, basado sobre todo en las canciones de su más reciente disco, The information, y también en el refuerzo que a un sampleador como él le entrega una banda de rock hecha y derecha. Bajo, guitarra, percusión y teclados a la altura del prestigio de un comandante de pelo lacio y ganas de quedarse en Chile.
 
"Nos gustaría quedarnos, de verdad, pero no podemos. Definitivamente volveremos" prometió el invitado de Sting, Copeland y Summers.
 
Beck fue el primer sabor a rock internacional que a las 10 de la noche tenía ya al Nacional lleno y expectante por lo que sería probablemente el más espectacular concierto de este año en Chile. Al menos, ya sabemos que es el más rentable del mundo. La reunión de The Police ha recaudado ya 170 millones de dólares, y eso que empezaron su gira recién en mayo.