Fue hace sólo cuatro años pero ya se puede escuchar como historia. También fue un compilado el primer disco de este sello que, desde su nombre hasta su correo electrónico, trae de vuelta la nomenclatura de la Revolución Francesa pero funciona entre un grupo de músicos vecinos de la comuna santiaguina de San Miguel. Namm, Farabeuf o Gepe grabaron por primera vez en Compilado Jacobino Discos (2004), y hoy, tras otros doce discos editados por el mismo sello, este segundo compilado es una buena y amplia actualización.
Se mantienen ciertos nombres de esa primera generación, pero sobre todo hay nuevos. Y se puede hablar de una "curatoría", porque tanto en la elección como en el ordenamiento de estas composiciones hay una propuesta de un recorrido por varias estaciones distintivas. El tecnopop de baja fidelidad de la canción inicial de J.G. Cabargas, hombre proveniente del siempre explorador trío Tobías Alcayota, es afín a las melodías cantadas y los teclados de Los Embajadores, el nuevo grupo de Sebastián Sampieri, ex integrante de Aves de Chile y Les Chicci. Así también los timbres de Francisco Caro tienen que ver con la elegancia acostumbrada en los acordes de Augias Amena. Pero este último, con un drástico quiebre en su propia canción, fija un primer cambio. Luego vendrán músicos como Montaña Extendida, Letu, The Cherry Blues Project y Post-Synthesis, el más experimentado y a la vez elemental de todos ellos, a diseñar con ruidos y loops los pasajes más abstractos del disco.
El contraste mayor viene justo a continuación por cuenta de Fabián Patzak, un hombre de la primera generación Jacobina, que toma una guitarra acústica y canta una canción folk en inglés. A partir de entonces esta antología no para de diversificarse. Namm, el alias experimental del músico Pablo Flores, se reinventa al estrenar en disco el trabajo que ha venido haciendo con la cantante Loreto Molina, donde ella entona una melodía coloreada además con arreglos de bronces que la hacen aun más orgánica. La Golden Acapulco trae su especialidad que es la reinvención electrónica y casera para el efecto siempre cadencioso del dub jamaicano. El dúo El Banco Mundial hace una cita a su amigo Gepe en "Theguitarofgepe", que de guitarra no tiene nada porque es otro experimento de ruido y saturación bien contrastado por un coro con voz de mujer. Y en esa variedad es hasta lógico que el cierre esté entregado a una banda de improvisación psicodélica a base de guitarras eléctricas: La Banda's es otro gran modo de expandir este disco. Con muestras de electrónica, abstracción, folk, melodía, vuelo reggae, ruido y psicodelia eléctrica bien combinadas, el núcleo Jacobino prueba que en la variedad no sólo está el gusto, sino también la consistencia.