BUENOS AIRES.- El roquero argentino Charly García, de 56 años, quedó hospitalizado en Buenos Aires, tras ser trasladado en un avión sanitario desde Mendoza, donde estuvo internado con neumonía, luego de protagonizar un escándalo en un hotel, informó la televisión local.
El músico viajó acompañado por su hijo Migue y a su arribo a Buenos Aires fue ingresado en el estatal Hospital Argerich, según allegados al artista.
García estuvo en una sala de cuidados intensivos bajo el efecto de sedantes aunque su estado de salud mejoró, señaló una fuente médica el miércoles.
Su hijo Migue, también músico de 30 años, está distanciado de la familia, pero se ocupó esta vez de estar junto a su padre. "Yo veo a mi papá como un mártir, como un artista que entregó todo. Tiene derecho al libre albedrío y a elegir cómo quiere vivir", dijo Migue al canal de noticias TN.
La familia manifestó su disgusto por la televisación de imágenes de cuando García era esposado y atado a una cama hospitalaria tras sufrir una crisis de nervios que lo llevó a reñir a golpes con uno de sus asistentes y romper instalaciones de su habitación.
Héctor Lamacchia, jefe de terapia intensiva del hospital mendocino, dijo que el músico "está respondiendo adecuadamente al tratamiento", poco antes de ser trasladado. El médico consideró que deberá permanecer internado por lo menos una semana.
Charly había brindado un recital en Mendoza, capital de la provincia homónima, a unos 1.000 km al oeste de Buenos Aires, cerca del límite con Chile.
Policías y paramédicos tuvieron que intervenir en el hotel para contener al músico, considerado el más productivo y emblemático del importante movimiento de rock argentino.
El autor de "Inconsciente colectivo" y "Clics modernos", entre decenas de las mejores canciones compuestas en Argentina en las últimas décadas, había sido demorado en una comisaría en abril.
En aquel episodio, agredió a golpes de guitarra a dos actores colombianos que presenciaban un concierto suyo en un bar.
Otro hecho accidentado que vivió en Mendoza se había registrado en otro hotel, en el año 2000, cuando casi desnudo se arrojó desde un noveno piso al agua de una piscina, filmado por la TV.
El artista, líder de dos de las bandas más populares del rock argentino como Sui Generis y Serú Giran, volvió a la crónica policial en setiembre pasado, cuando trató de derribar a patadas la puerta de un local nocturno de Buenos Aires porque le habían suspendido un show.
