Revise aquí un clásico de clásicos
NUEVA YORK.- Las canciones de fácil digestión de Kenny Rogers son inconfundibles. Cuando suena en la radio su voz suave con un toque áspero, se derriten hasta las "cowgirls" más duras. Éxitos como "Lucille", "The Gambler" y "Lady" lo catapultaron al olimpo de las listas del pop y el country.
Su dueto con Dolly Parton "Islands In The Stream" y "We’ve Got Tonight", con Sheena Easton, son ya clásicos. En su carrera de cinco décadas Rogers se llevó numerosos Grammy y decenas de discos de oro. Hoy, el romántico cantante texano celebra su cumpleaños número 70.
Cinco mujeres, ocho hermanos, mil canciones
Pese a que está en edad jubilatoria, este artista famoso por su barba blanca no piensa abandonar su trabajo. "Me gusta realmente mucho lo que hago. La gente vive más cuando les gusta lo que hacen. Porque entonces nunca abandonan", asegura.
Como padre reciente, no parece que le resulte difícil conservarse joven. Hace cinco años su quinta mujer, Wanda Miller, dio a luz a gemelos. Y Rogers tiene además otros tres hijos de matrimonios anteriores.
Como hoy es un ícono del country americano, se olvida fácilmente que intentó abrirse paso sin éxito con varias bandas poco conocidas. Kenneth Donald Ray Rogers nació en 1938 en una familia de ocho hermanos.
Su padre era un trabajador de los astilleros en Houston (Texas). Creció con muchas estrecheces y con 13 años aprendió solo a tocar la guitarra, cantó en el coro de la iglesia y creó una banda siendo adolescente.
El Midas del country
Su disco The gambler (1979) vendió tres millones de copias en pocos meses y convirtió a Rogers en el número uno de la música country en Estados Unidos. Le granjeó su segundo Grammy y sólo fue desplazado del número uno de las listas por su siguiente álbum, Kenny.
Y así siguió año tras año: cada nuevo LP hasta Once upon a Christmas (1984), llegó al disco de oro o incluso platino. Al igual que sus singles, como "Love or something like it" y "She believes in me", que fueron número uno.
"Yo mismo nunca me consideré un gran cantante. Pero soy bueno contando historias", dijo cierta vez Rogers. En 1982 actuó en una película que cuenta el surgimiento de sus éxitos "The gambler" y "Coward of the county".
Con su receta de letras sencillas producidas de manera impoluta y masiva entró poco a poco desde los años 80 en el mundo del pop, por ejemplo con el cover de Lionel Richie "Lady" y el dueto "Don’t fall in Love with a dreamer", con Kim Carnes.
A fines de los '80, sin embargo, su popularidad comenzó a decaer, salvo algunos éxitos como "Make no mistake, she’s mine", a dúo con Ronnie Milsap (1987). En vez de en las listas de éxitos, el nombre de Rogers aparecía sobre todo en los carteles de conciertos y eventos de beneficencia.
También fundó una cadena de restaurantes, Kenny Rogers’ Roasters, y editó dos libros con sus fotografías: "Kenny Rogers’s America" y "Kenny Rogers: Your Friends and Mine". Saca al mercado de manera regular nuevos álbumes, el más reciente Water and bridges, de 2006. El single "I can’t unlove you" consiguió volver a entrar en los primeros 40.
Fue casi con 40 años que por fin consiguió, en 1977, un éxito por el que ganó un Grammy, "Lucille". Luego de ello Dottie West y Dolly Parton se peleaban por presentarse con este apuesto texano y los Bee Gees escribieron canciones para él.
"Yo mismo nunca me consideré un gran cantante. Pero soy bueno contando historias", dijo cierta vez Rogers. En 1982 actuó en una película que cuenta el surgimiento de sus éxitos "The gambler" y "Coward of the county".