Rainer Werner Fassbinder habría sido un habitual consumidor de drogas para mantener su sorprendente ritmo de trabajo.
Archivo El Mercurio
BERLÍN.- El cineasta alemán Marco Kreuzpaintner proyecta rodar en Alemania la primera película de ficción sobre la vida del célebre director de cine Rainer Werner Fassbinder, contó el realizador en conversación con dpa.
"Simplemente me pregunté cómo puede ser que el director de cine alemán más significativo para nosotros todavía no haya recibido ningún homenaje cinematográfico", explicó Kreuzpainter, quien actualmente trabaja junto con la ex pareja de Fassbinder, Harry Baer, en el guión de la obra.
"Quiero mostrar al hombre locamente apasionado, el que era más talentoso que todos sus contemporáneos, un hombre que en un país tan aburgesado y mediocre como la Alemania de los años '70 y '80, consiguió que por primera vez la cinematografía alemana recibiera atención internacional", agregó.
Ya se eligió al actor que hará de Fassbinder: "Hay un actor joven, bastante conocido, que aceptó hacer el papel", confió a dpa Kreuzpainter, "pero todo lo que puedo decir es que interpretará a Fassbinder desde sus 17 años hasta su prematura muerte en 1982, cuando tenía 37".
El director desarrolla su proyecto en estrecha colaboración con el Fundación Rainer Werner Fassbinder. Para que la película resulte lo más auténtica posible, Kreuzpainter quiere contactar a los actores de Fassbinder como Hanna Schygulla, Ingrid Caven, Irm Hermann y Günter Lamprecht, pero también a gente de su equipo técnico como el cámara Michael Ballhaus.
Todavía no se ha determinado si algunas de estas figuras también actuarán en la película. Kreuzpainter es desde hace 10 años amigo de Baer, que tiene 60 años y además de actor es productor y autor.
El rodaje se iniciará el año próximo. "Será un gran biopic, aunque la expresión no me convence. La historia empezará con la juventud de Fassbinder, que muchos no conocen y que transcurrió mayormente en Colonia; el relato llegará hasta sus grandes días en Múnich y culminará en su derrumbe", explicó el joven realizador.
Según Kreuzpainter, "no debe representarse a Fassbinder exclusivamente como el demente o el aniquilador de personas que muchos describen. Para mí el punto de partida es lo que Fassbinder dijo: 'todo lo que quiero es que me amen'".
"La enorme necesidad de amor de Fassbinder, aunque en su vida se haya expresado de modo perverso, en sus películas lo hizo siempre de un modo magnífico, y ése es el tema de mi película", contó el director.
"La película deberá incluso ayudar a Fassbinder en su busca de ese amor al que siempre aspiró", agregó el realizador. "Y aunque hoy todo el mundo se refiera a él como uno de los verdaderos grandes, no hay que olvidar que en su tiempo fue una de las personas más discutidas e incluso odiadas. Era de todo menos querido".
"Fassbinder fue un excelente sismógrafo para la fuerza autodestructiva que siempre exisitió en Alemania. Era un gran gozador, alguien que bebía, tenía sexo salvaje, tomaba drogas, fumaba y gritaba", contó Kreuzpainter con entusiasmo, quien confesó reconocer en sí mismo esos impulsos.
Según el director, hoy el paisaje cultural es mucho más pobre que entonces. "Grandes personalidades brillantes que tengan algo que decir" ya prácticamente no hay, concluyó.