HAMBURGO.- El director de cine Wim Wenders, quien en su última película, "Palermo Shooting", aborda el tema de la muerte, tuvo él mismo una experiencia cercana cuando era joven a causa de una sobredosis de galletas de marihuana, según contó hoy a dpa en Hamburgo.
Siendo estudiante de cine en Munich, se devoró "de manera completamente irresponsable 20 galletitas 'especiales', que se habían preparado para una fiesta y de las que cada uno de los invitados no debía comer más que una", contó Wenders.
Las galletitas estuvieron a punto de ser lo último que se llevó a la boca. "Es que las galletitas me resultan irresistibles, y en esa fiesta no había nada más de comer", se justificó el cineasta.
Wenders fue nominado al Oscar en 1999 en la categoría de Mejor Documental por "Buena Vista Social Club"