Santos no entusiasmó ni al público ni la crítica. Por eso la decepción de su director, Nicolás López.
El MercurioSANTIAGO.- Hasta antes del estreno de "Santos", Nicolás López (25 años) no había conocido fracasos estrepitosos en sus proyectos de cine y TV (salvo por el criticado y deslucido Transantiaguinos). Por eso mismo se presentaba en los medios como un precoz realizador seguro de sí mismo. Alguien que no está dispuesto a ser derrotado. Nacido para el éxito.
"Genial", "brillante", "el primero en hacerlo", eran las palabras que usaba para hablar de proyectos y guiones propios.
Hoy, sin embargo, le toca "bailar con la fea", confiesa López en su blog dobleverso.com. Nada más preciso para definir sus sentimientos ante el rotundo fracaso de su historia de superhéroes obesos. Santos no despertó interés en el público. Se convirtió en un fracaso de taquilla. Tanto así que no alcanzó a durar dos semanas en cartelera.
Desde entonces, López guardó silencio. No quería dar entrevistas. Y desapareció de los lugares muy públicos, esos donde siempre hay un periodista preguntón. Pero, como a Ciudadano Kane, le llegó la hora de enfrentar la verdad y se desahogó en su diario virtual.
Este es un extracto de su mea culpa por su primer frascaso, con errores ortográficos incluidos. "Que duro ha sido el viaje de Santos. Que duro, que doloroso, que divertido, que delirante y que vivo. Y… nos fue mal. O sea, mas que mal. Fue un mega-fracaso en Chile (creo que recaudamos el 3 por ciento de Promedio Rojo). La critica la demolió sin misericordia. Creo que nunca había leído comentarios tan violentos en mi vida (o si…pero como no salía mi nombre no me acuerdo)", señala de entrada.
Y agrega: "(…) En fin, supongo que es paranoia mía y no hay una conspiración del terror en mi propio país contra mi persona, sino que –tal como me lo dijo una seudo-amigui en un momento de intenso caos mental- 'no les gusto no más'. Y así de simple. No les gusto. Y duele. Claro que duele".
Digno, prefiere no responsabilizar a los periodistas. "¿Es culpa de la prensa que la peli haya fracaso en taquilla? Lo dudo, ojala fuera tan poderosa. ¿Es culpa de nosotros? Por supuesto. En algo –o en todo- nos equivocamos (segun muchos, comenzando con mi nacimiento en 1983). ¿Qué tan mal nos fue? Bueno, una cosa es hacer 10,000 personas un fin de semana (lo que sería considerado como un resultado mediocre). Otra…menos de 3,000. Ridículo, absurdo, surrealista, patético y para nada épico. Pero bueno. Esto, como ya he dicho antes, es sin llorar (en publico, ejem…)".
A la hora del análisis serio, el ex columnista de la Zona de Contacto no se anda con rodeos. "Cuando uno esta en el suelo (escupido y vomitado) tiene que aprender a levantarse y pensar en que se equivoco", dice.
"¿Es Santos demasiado rara?, ¿nos pasamos de listos?, ¿o de tontos?, ¿era necesario tanta explicación, tanta dimensión paralela, tanto anarquísmo narrativo, tanto croma, tanta post, tanta banda sonora, tanta co-producción? Quizá si. Quizá no…pero era parte del riesgo (¿y quien en su sano juicio quiere hacer “arte” sin arriesgar?). Santos era lo que me pedía el cuerpo a mis 22 años (cuando la escribí, el 2005). Hice la película que quería y no puedo estar mas orgullosa de ella".
El mea culpa completo de López lo puede leer en dobleverso.com.