El libro de Ricardo Sumalavia narra paralelamente la historia de dos individuos que buscan a sus hermanos.
Editorial BrugueraSANTIAGO.- Si hubiera que escoger al escritor revelación de las letras peruanas, Ricardo Sumalavia sin dudas estaría peleando el cetro. No en vano fue nominado en 2006 al prestigioso premio Herralde, uno de los más codiciados por la comunidad literaria hispanoamericana, gracias a su primera novela, "Que la tierra te sea leve".
El éxito de Sumalavia es reconocido en Perú, y en estos momentos comienza la tarea de expandirse por Chile gracias a esa misma novela, que en las últimas semanas llegó a las librerías locales, donde ya cosecha una buena recepción por parte de los lectores.
Pero ésta no es la primera obra de Sumalavia. Antes ya había dado que hablar con los libros de cuentos "Habitaciones" (1993), "Retratos familiares" (2001) y "Enciclopedia mínima" (2004).
El autor, que ahora vive en Burdeos y trabaja en el departamento de Español de la Université Michel Montaigne-Bordeaux, conversó con Emol sobre su aplaudido libro y sobre una nueva creación, que se sitúa en un escenario especialmente sensible para los peruanos: El gobierno de Alberto Fujimori.
-En "Que la tierra te sea leve" dos hombres buscan a sus hermanos. ¿Cuál es el fondo de esa búsqueda?
-Es la búsqueda y construcción de la identidad a través de los otros, saber quiénes somos cuando tratamos de saber algo más de ellos. Como si nos sostuviéramos el espejo mutuamente.
-El libro expone el juicio social al que son sometidos personajes como un enano y dos prostitutas, pero con un contrapunto en la amnesia. ¿Es ésta una manera de escapar de ello?
-Si bien es cierto que sus condiciones de prostitutas, enanos y borrachines los convierten en sujetos marginales, yo he pretendido ir más allá del juicio social y plantearlos como personajes carnavalescos que quieren crearse su propia dinámica de vida, sus propios códigos estéticos en espacios cerrados. La amnesia, en este caso, no sería necesariamente un escape, sino una natural negación de ese otro mundo.
El autor contó que actualmente trabaja en una novela corta, contextualizada en el gobierno de Fujimori. "El año pasado terminé una versión de ella. Por ahora la estoy dejando reposar, mientras busco otros datos y trato de encontrar el momento propicio para retomarla y darle la forma definitiva (...) Por ahora sólo puedo adelantar que exploro narrativamente las distintas construcciones, la real y la ficticia, de un investigador privado a fines del gobierno de Fujimori".
Pese a su residencia en Burdeos y a su nacionalidad peruana, en la última década el escritor también se ha visto envuelto por el universo coreano, con su trabajo como traductor de textos provenientes de ese país. Sin embargo, reconoce que sus principales lazos actualmente están en Francia, pero que ello no implica un desapego con Perú.
"Cada vez me siento más cómodo viviendo en Burdeos. Los estímulos culturales y vitales de esta ciudad son enormes. Pero ello no implica un distanciamiento de mi país. De un modo u otro, sin importar donde viva, seguiré siendo un escritor peruano. Y si viviera de nuevo en Perú, seguro que algo de escritor exiliado sentiré".