Heath Ledger recibió cocaína de parte del equipo de Splash News, que lo grabó consumiendo la droga y relatando sus problemas personales.
APLOS ANGELES.- El actor australiano Heath Ledger no sólo recoge premios después de muerto: ahora es el centro de atención de una demanda en la Corte Suprema de Los Angeles por un video donde aparece supuestamente en una habitación con cocaína sobre una mesa.
La semana pasada la imagen de Ledger fue ensalzada durante la gala de los premios Globo de Oro, en lo que muchos vieron el preludio de un Oscar póstumo para el actor. Sin embargo, otra imagen completamente opuesta del actor australiano será debatida en un juicio, que se iniciará el próximo mes en la ciudad del sur de California.
Se trata de una demanda presentada por una reportera identificada como Jane Doe, que acusa a su antiguo empleador, la agencia de noticias Splash News, de invasión de privacidad, fraude e imposición intencional de estrés emocional, entre otras cosas. Doe participó en la realización del video.
La grabación fue divulgada durante el funeral de Ledger el 22 de enero del 2008 y está disponible en Internet. En ella se observa a un Ledger exhausto, con tics nerviosos y sentado frente una mesa donde parece haber cocaína.
El protagonista de "Secreto en la Montaña" ignoraba completamente que estaba siendo filmado, por lo que habló con la periodista de temas privados, como su relación con la actriz Michelle Williams y su largo historial de abuso con las drogas.
"Estoy en serios (problemas) con mi novia. Tenemos un bebé de dos meses y se supone que yo no debo estar aquí", señaló Ledger aquella noche. Al parecer el actor también les confesó que solía fumar marihuana cinco veces al día.
Todo esto sucedió el 29 de enero de 2006 después de la gala de los Screen Actors Guild (SAG) en el reconocido hotel Chateau Marmont cuando el actor supuestamente se dejó llevar por unos extraños que le ofrecían drogas.
Este presunto grupo de amigos resultaron ser la reportera demandante, Jane Doe, junto a un "paparazzi" y un camarógrafo de Splash News.
El programa de televisión "Entertainment Tonight" compró los derechos de reproducción del video, pero se negó a divulgarlo tras una intensa presión por parte del publicista de Ledger.
Curiosamente ahora el caso no tiene nada que ver con los daños cometidos contra la reputación de Ledger, ya que, según las leyes estadounidenses, sus derechos de privacidad murieron con él.
La demanda acusa a la agencia de perjuicios contra la reportera. La mujer asegura que fue engañada durante la realización del video y que además le habían asegurado que sería destruido.
La querella presentada por Doe tiene como fin la destrucción del material filmado, así como una compensación financiera para ella.
Por su parte, Splash se está defendiendo de la acusación de que un empleado fue reprendido por el incidente, y de que la empresa reembolsó el dinero gastado en cocaína a sus empleados. Además, argumenta que el nombre y la imagen de la reportera fueron alterados para que no se distinguiera.
La publicación cataloga a su ex empleada de "hipócrita" ya que en su declaración dijo que antes de que la agencia vendiera el video, ella había narrado todos los detalles de aquella noche a la revista de espectáculo "OK".
La reportera alega que cuando Ledger se dio cuenta que estaba siendo grabado se puso furioso, pero sus acompañantes le prometieron la destrucción del video.
Fue la muerte del actor, tras una sobredosis accidental de medicamentos recetados en su apartamento de Manhattan, lo que cambió completamente el curso de las cosas.
La agencia Splash aprovechó para hacer dinero con el video. Doe se aventuró a contar toda la historia a la revista "OK" manteniendo el anonimato, por lo que al parecer recibió la suma de 400 dólares como único pago. Doe se defiende argumentando que todo se iba saber: "No había nada que defender".
Durante su declaración, la periodista dejó claro que su forma de actuar fue diferente a la de sus colegas. "Si usted trae a alguien a su habitación para charlar como amigos, y sabe que esa persona tiene un problema con la cocaína, y usted le da más de su droga favorita, eso es bastante retorcido. Esto puede matar a la persona", aseguró.
Ahora Doe, que además trabajaba de forma independiente para la revista "People", ya no trabaja para ninguno de estos medios. Su abogado no quiso dar detalles de su actual ocupación.