Marc Anthony señaló que el viaje de 14 horas fue agotador, pero se mostró tranquilo en su presentación a la prensa.
ReutersVIÑA DEL MAR.- Usa gafas oscuras y habla pausado Marc Anthony, cuando llega a la conferencia de prensa de esta tarde en Viña del Mar. Se ve cansado y no es para menos. "Estuvimos volando 14 horas, no dormí nada", cuenta de su viaje, tras el cual, más encima, se encontró con móviles periodísticos que lo seguían y que en dos ocasiones chocaron el vehículo en que se trasladaba.
"Se me hace difícil... estuvimos volando 14 horas, súper cansado... lo viví, lo vi, se me hace difícil creer... marca el tono... cuando subí estaba viendo la televisión, y cómo montaron las imágenes de mi llegada en dos segundos, y 'mira cómo anda'... para mí se me hace difícil entenderlo, y se me hace más claro que tengo que trabajar muy fuerte esta noche para hacer lo mío", dice entrecortado, con pausas.
Una recepción que se alejaba de sus parámetros, pero tras la cual se repuso tanto como para mostrar total relajo, tanto como para alterar las estrictas reglas que regularon su rueda de prensa: Anthony permitió el ingreso a más periodistas y autorizó el uso de flash para sacarle fotografías.
Con flashes en la cara, entonces, supo del mito del "monstruo", a lo que con humor e ironía respondió "gracias, porque si no estaba nervioso antes, ahora lo estoy. Se me hace difícil creer, y si hubo que esperar 20 años para llegar, valió la pena. Estaré abierto, vulnerable, listo y súper vivo para hacer lo que Dios te dé", dijo.
El marido de Jennifer Lopez también analizó el particular fenómeno que ha producido en Chile, sobre el cual aseguró que "se me hace difícil entender el impacto (...) Me tocó conocer a Chile tan tarde. Pero aquí existe algo único, un amor por el arte, el pueblo, el público, un calor tan humano, tan lindo, tan completo, que cuando me invitaron de regreso fue 'sí, dime cuándo, cuenten conmigo', porque la última vez la pasé tan bien".
"Chile debe ser destino obligado (para los artistas), no veo por qué no, viajaré por el mundo entero hablando", complementó.
Sobre sus planes para este año, el salsero contó que "estoy en plena grabación de dos discos, uno de baladas en español y el primero (que grabaré) en inglés en cinco años". El primero de ellos se titulará Ícono, en homenaje a artistas hispanoamericanos a cuyo repertorio acudió, y entre los cuales se encuentran Juan Gabriel, José Luis Perales y José José. "Es una forma de homenaje a nuestros cantautores, son mis canciones favoritas", cuenta.
Del disco en inglés, adelantó que "no tiene nada que ver con salsa ni nada rítmico, es un disco de pop, baladas y canciones movidas", pero se detuvo argumentando que "no me gusta hablar de lo que viene, es... pretencioso".
Su agenda de 2009 además incluye dos películas y seguir de gira, después de la cual podría tomarse "dos a cinco años libres", dijo medio en broma, medio en serio.