CHICAGO.- El polémico cineasta estadounidense Michael Moore afirmó que su ópera prima, "Roger & me", pronosticaba la desaparición del quebrado fabricante de automóviles General Motors, cuyo colapso adjudicó a su ineptitud e indiferencia hacia sus obreros.
"Es una triste ironía que la empresa que inventó la 'obsolescencia planificada' —fabricar autos que se descompusieran en pocos años para que el cliente debiera comprar uno nuevo— se volvió ella misma obsoleta", escribió en su blog en internet.
General Motors, que se declaró en quiebra este lunes, monopolizó durante décadas y hasta el año pasado el título de número uno mundial del automóvil.
"A principios de los 80, cuando GM registraba ganancias récord, trasladó miles de puestos de trabajo a México y otros lados, destruyendo así las vidas de decenas de miles de trabajadores estadounidenses", aseguró Moore.
Tras dos décadas recriminando al gigante automotor, sostén de la economía de su ciudad natal, el polémico cineasta afirma en su blog que la bancarrota es una muerte merecida.
En su película debut, Moore documentó sus incansables esfuerzos en pos de ser recibido por el entonces presidente de GM, Roger Smith, tras el devastador desmantelamiento de la fábrica para la ciudad de Flint, estado de Michigan.
Considerado a la izquierda en el espectro político estadounidense y laureado con un Oscar en 2003 por su manifiesto contra las armas, "Bowling for Columbine", Moore también es autor de documentales como "Sicko", sobre el sistema de salud pública en Estados Unidos, y "Fahrenheit 9/11", una furibunda crítica al gobierno de George W. Bush.