El ''rey'' camina en la losa del aeropuerto, tras bajarse del avión en que llegó a Chile. Carabineros lo escoltan.
El MercurioSANTIAGO.- No tantos son los chilenos que pueden contar que conocieron a Michael Jackson un poco más de cerca, pero entre los pocos hay un grupo que incluso tuvo oportunidad de compartir con él en nuestro propio territorio: Se trata de los encargados del único concierto que el "rey del pop" realizó en Chile, en 1993.
La productora general de ese concierto, Milena Rocco, recuerda que "fue súper emocionante cuando nos enteramos de que efectivamente íbamos a hacer el show. Después, cuando llegó, fue todo muy entretenido, aunque no tanto cuando canceló uno de los dos conciertos. Eso fue muy estresante".
Según cuenta la productora de la empresa Prodin —una de las principales en la realización de megaeventos en ese momento— la razón oficial para esa suspensión fue que tenía problemas en la espalda, "pero nunca supimos si fue cierto o no. Fue bien confuso, se habló de problemas estomacales, medios hablaron de que le dio 'chilenitis' ", recuerda entre risas.
De todos modos, Rocco no guardó una imagen de Jackson como "divo", sino como una persona "súper tímida. Hablaba bajito, no te miraba a los ojos al hablar, andaba siempre tapado. Era muy suave y dulce, en realidad".
Además de ver los temas relativos al concierto, la productora debió encargarse de los requerimientos de Jackson en Santiago. "Fuimos a una juguetería, a una tienda de videos, una de música, y a una tienda más exclusiva en Presidente Riesco, que tenía equipos de alta fidelidad y un mini teatro. Allí le pusieron un laser disc de su hermana Janet", cuenta.
En esas salidas pudo comprobar que el cantante no era un tipo tan maniático y lejano, como describían las crónicas de esos años. "Fue siempre muy abierto para firmar autógrafos, pese a que pedíamos cerrar las tiendas, e íbamos en horarios de poca concurrencia. Pero como se especuló que no iba a venir, o que en realidad había venido un doble, le pedimos que hiciéramos estas actividades para que todos supieran que efectivamente era Michael Jackson el que estaba en Chile. La gente era muy escéptica, no pensaba que de verdad podía venir", recuerda.
Por ese recuerdo presente, y por los 50 años que Jackson tenía al morir, Milena Rocco reaccionó a la noticia de su fallecimiento "con sorpresa. Si bien se sabía que estaba enfermo, una nunca se imagina un desenlace así".