BARCELONA.- Tras la anulación de su concierto en Marsella (sur de Francia) por el derrumbe del escenario que causó dos muertos, la cantante estadounidense Madonna se presentará el martes en el estadio Olímpico de Barcelona y rodará un videoclip allí.
En la segunda gira del "Sticky & Sweet Tour", Madonna actuará en la ciudad española tras nueve años sin hacerlo, con un espectáculo en el que presentará su disco Hard candy, y en el que en las últimas semanas ha incluido un recuerdo para el que fuera su par masculino por largo tiempo, Michael Jackson.
La "reina del pop", que ya presentó Hard Candy en Sevilla y Valencia el verano pasado, visitará en esta segunda gira Barcelona, Madrid y Zaragoza, siempre con Paul Oakenfold como invitado para la apertura.
Así como recientemente el conjunto irlandés U2 aprovechó el estadio del Barcelona (Camp Nou) para rodar un videoclip, Madonna también rodará el suyo, pero en el estadio olímpico (donde juega el Espanyol).
La cantante convocó a los fans más acérrimos a través de su sitio web, pidiéndoles que asistan "vestidos para impresionar" y con material antiguo que tengan de la artista.
Los participantes del rodaje serán seleccionados previamente por correo electrónico y no cobrarán por la filmación que se efectúa este martes en Barcelona, y a la que no asistirá Madonna.
Según la promotora Live Nation, tanto para el concierto de Barcelona como para el de Madrid aún hay a la venta entradas que oscilan entre los 65 y los 95 euros (entre 92 y 135 dólares).
Todo está previsto para la actuación de la reina del pop en el estadio Lluis Companys, sede de los Juegos Olímpicos de 1992 y la entidad Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) habilitará un servicio especial de autobuses hasta la una de la madrugada.
Según la productora, en 2008, 2.350.285 fans asistieron al espectáculo "Sticky & Sweet" en 58 ciudades, con 650.000 entradas vendidas en sus conciertos por Latinoamérica, 72.000 entradas en el concierto en el Dubendorf Airfield de Zurich, 75.000 en Londres y cuatro llenos totales en el Madison Square Garden de Nueva York (60.364 entradas).