Todavía figuran vestidos con mamelucos en algunas fotos del grupo que circulan desde hace un par de años, pero el guardarropa es justo una de las señales para advertir la evolución que ha tenido la banda rockera Robot The Mimbre hasta su actual etapa. Ahora trabajan con camisa y corbata, como quien pasa de los talleres de una empresa a las oficinas administrativas.
No es casual. Esa empresa es Robótica Chimbarongo, la personalidad jurídica ideada por esta banda formada en 1999 y en torno a la cual ha desarrollado una carrera que ya incluye dos discos, entre el propio Robótica Chimbarongo Ltda. (2005) y el muy reciente Cadena de producción (2009), lanzado en marzo pasado. Y si la sede de la fábrica queda en Chimbarongo, la capital chilena del mimbre, el grupo se ha presentado en diversas ciudades de Chile y en Buenos Aires en 2006 y 2007.
-Ahora nos vestimos de oficinistas de la fábrica, siguiendo el concepto de "rock de oficina" de Cadena de producción -explica el cantante Ignacio Suárez, que integra el cuarteto junto a La Cobra (Esteban Ruedlinger, guitarra), Pablo Aranda (bajo) y Néstor Mota Osorio (batería)-. Los mamelucos fueron un problema cuando tocamos en verano en Buenos Aires. La humedad y el calor no se llevan con los mamelucos. Cuando hagamos un show del (disco) Robótica… tal vez los volvamos a ocupar.
El empleado RTM24Z
La continuidad entre los dos discos del grupo es clara. Mientras Robótica Chimbarongo se refiere al despertar de los robots-obreros, Cadena de producción alude a la identidad y conciencia de los robot-oficinistas, a partir de las canciones y también del cuadernillo ilustrado por los diseñadores Leonardo Venegas y Matías Seguel que incluye el CD, editado por el sello Bolchevique.
-El primer disco presentó a la banda en lo musical y lírico. En Cadena de producción la idea fue ingresar a la fábrica a ver qué pasaba adentro -compara el cantante-. Si bien el personaje principal de la historia, RTM24Z, es un oficinista, aparecen varias clases de trabajadores de la fábrica. Están los obreros, los oficinistas, el o los retrovisores, que son una mezcla entre ejecutivos y predicadores, y los anónimos gestores. A estos últimos sólo se les ven las manos que tiran de los hilos.
-¿La cuestión al final es la misma para obreros y oficinistas, o cada clase tiene sus problemas distintos?
-Hay un instante en la historia en que uno llega a pensar que los problemas son los mismos para todas las clases de trabajadores de la fábrica, pero a medida que se desarrolla el conflicto se cae en el desencanto. En todo caso, lo importante es la interpretación de cada persona. Al fin y al cabo son sólo máquinas.
-¿Es distinta la música también, por ese nuevo argumento?
-En Cadena de producción intentamos hacer un disco más duro, más áspero que el Robótica… sin perder la onda canción. El desarrollo de la historia ayudó bastante en este sentido. En este disco tanto la música como el lenguaje utilizado son muy directos. El resultado quedó muy potente ayudado por el sonido demoledor que logramos en los Estudios Bolchevique.
-Por primera vez hay invitados en un disco de usedes, como Pablo Diabuno y Marcelo Da Venezia, de los grupos Silencio y Weichafe. ¿Cómo se dio esa participación?
-A Silencio los conocemos hace tiempo, desde el 2001. Son muy buenas personas y una tremenda banda, Pablo Diabuno ya había compartido escenario con nosotros cantando "Contra la pared" y había salido increíble. Así que lo invitamos a cantar la canción "MBN". A Marcelo Da Venezia también le ofrecimos cantar en "MBN", y la canción ganó mucho con la colaboración en las voces de ambos. ¿Weichafe?... la raja.
Conexión Temuco-Santiago-Chimbarongo
Dos integrantes del grupo, La Cobra y el propio Ignacio Suárez, nacieron en Temuco, mientras el bajista Pablo Aranda es santiaguino y el baterista Néstor Mota Osorio es hijo del pueblo de Peñaflor, también en la Región Metropolitana. En parte por eso Robot The Mimbre mantiene un fuerte lazo con el movimiento sureño del llamado rock lárico que gira en torno a grupos de Temuco y sus alrededores como Rey Sombra, donde alguna vez participaron Suárez y La Cobra.
-En general la ciudad en la cual creces forja tu visión musical de algún u otro modo -comenta el cantante-. En ese sentido las visiones que tenemos las cuatro personas que forman Robot The Mimbre son distintas pero complementarias. Mota es de Peñaflor, donde también se vive de manera distinta el rock a Santiago. De hecho son muy metaleros en Peña y eso se ve reflejado en las influencias de nuestro batero.
-¿Y cómo se nota esa condición sureña, peñaflorina o santiaguina en el sonido del grupo?
-Tal vez el concepto de Robot the Mimbre puede haberse forjado de manera inconsciente por la impresión que me produjo llegar a una ciudad tan grande, en comparación a Temuco, en donde la gente se encuentra tan "acompañada" y sola a la vez. El paisaje tan gris de Santiago también me impactó y me atrajo los primeros años de citizen campesino. Ahora es todo más cotidiano, casi un letargo.
-¿Qué tan importante sigue siendo el sur de Chile para ustedes? ¿Habitualmente están tocando en Temuco?
-Hemos tocado bastante en Temuco. Seguimos manteniendo contacto con nuestros amigos allá, y el pasado 27 de junio tocamos con Rey Sombra y el Gran Temor acá en Santiago. La cosa estuvo bien sureña, hasta llovió. El 5 de septiembre estaremos visitando Temuco en una fecha de De Coolto Fest Tour, en la cual tocaremos con Devil Presley y Rey Sombra. Y desde hace un par de años formamos parte activa del movimiento de Rock Lárico con quienes hemos organizado tocatas y compilados. La relación con ellos es excelente.
-¿Y cómo se dio la elección de Chimbarongo como el lugar en torno al que gira la historia del grupo?
-La empresa tenía que tener un nombre. Nos pareció ok que se llamara Robótica Chimbarongo Ltda. Nombre de fantasía Mimbretronics Inc.
-¿En Chimbarongo saben de la existencia de Robot The Mimbre? ¿No los han declarado hijos ilustres o algo así?
-Me agregó a Facebook el portal chimbaronguino. Eso ya es un avance. Aparte hemos recibido mails de personas de Chimbarongo que nos piden que vayamos a tocar allá. Sería genial para nosotros. Tarea pendiente.