La nostálgica agenda "Pascualina" celebra 20 años

SANTIAGO.- En una rápida búsqueda por Facebook, aparecen al menos 22 grupos dedicados a honrar de alguna forma a la popular agenda "Pascualina". "Yo también tuve Pascualina", "Yo usé la agenda Pascualina como diario de vida" o "I love Pascualina", son sólo algunos de los que pueden encontrarse.

Una clara muestra de la alta recordación y nostalgia que puede generar un objeto tan impensado como una agenda, pero que pocas mujeres hasta edades cercanas a los 30 podrían decir que nunca tuvieron o, al menos, quisieron —entre ellas algunas famosas de pública devoción por la libreta, como Fernanda Hansen o la periodista Mónica Rincón, entre otras—.

Concientes de ese cierto carácter de referente "pop", la empresa que edita la agenda decidió complacer a las nostálgicas y coleccionistas con una inusual idea: Reeditar la primera versión de 1990, que la diseñadora chilena Paulina Mönckeberg pintó íntegramente a mano, desde la portada hasta la última hoja.

Claro que la edición es en calidad de "perpetua", o sea, sólo hay fechas, pero no días, de modo que la dueña la utilice simplemente en el año que se le antoje. La reedición se suma a la debutante agenda ejecutiva, orientada a trabajadoras que se atrevan a sacar de su cartera una libreta llena de colores y dibujos, pese a que los 12 años estén lejanos en su calendario personal.

Inicios de Pyme

El recorrido de la agenda y el personaje, desde la apuesta de una diseñadora hasta su transformación en un referente generacional, se condice con el devenir de sus creadores.

En 1989, la diseñadora Paulina Mönckeberg pintó a mano todas las páginas de la que sería la matriz de su agenda para el año siguiente, de la que luego editó 10 mil copias.

El éxito fue inmediato y creciente, hasta llegar al tiraje de 500 mil ejemplares que tiene hoy, con presencia en más de 22 países, entre los que se incluyen Polonia, Corea y Japón.