Sorprendente ensamble de jazz libre se rearticula en vivo esta noche

SANTIAGO.- Puede ser incomprensible y hasta puede ser agresivo y hostil, pero nunca deja de ser estimulante escuchar una sesión de free jazz. Es la variante jazzística que nació prácticamente por generación espontánea desde el pensamiento musical del saxofonista Ornette Coleman hacia 1959 y que se cristalizó en 1960 con el disco de improvisación colectiva Free jazz. Y es el mismo músico que este año deslumbró en el Teatro Caupolicán con un concierto de jazz libre con 79 años encima.

Una modalidad chilena tiene sonido propio y nombre de guerra en el octeto que encabezan los hermanos Diego y Hugo Manuschevich: Los Ogros del Swing. Es el grupo que esta noche domina las programaciones del jazz de la ciudad con una nueva formación con respecto al álbum que publicaron en 2007 bajo el título de ¿Los logros del swing?. Ahí descompusieron otra vez los parámetros más rígidos del jazz convencional para convertirlo en una propuesta estética nueva y desafiante.

Ocho voces por separado y en conjunto

Diego Manuschevich es el compositor de la mayoría de las piezas del octeto, aunque su característica principal es la contundencia y determinación con que aborda las improvisaciones de largo vuelo y aliento. Se le recuerda una presentación en una fría noche del invierno de 2005 en la Sala Fech, con su trío, donde realizó un solo intercalando instrumental durante 60 minutos sin detenciones. Manuschevich anuncia para hoy el uso del saxo tenor, el saxo soprano y el clarinete bajo.

El grupo se completa con el cuerpo de vientos que incluye a otros solistas de la primera línea actual, como el saxofonista alto Cristián Gallardo, quien también alterna la flauta traversa y el clarinete, Alfredo Abarzúa con el clarinete y el clarón, Benjamín Vergara en la trompeta y Jorge Prieto en el trombón. Éste es el frente de ataque de Los Ogros del Swing.

En la sección de ritmo, que toda agrupación de jazz tiene como plataforma, aparecen el guitarrista Diego Farías (quien acaba de lanzar por su lado el disco Rompecabezas, junto a su cuarteto post-bop), el bajista Javier Valdebenito (quien proviene del grupo de cumbia rockera Combo Ginebra) y el baterista Hugo Manuchevich (el hermano mayor de Diego y colíder del proyecto.

El concierto programado en el club de jazz Thelonious (Bombero Núñez 336, Bellavista, 22:30 horas, $2.000), también tendrá la participación del compositor Raúl Díaz, un músico que ha venido desarrollando la improvisación libre desde la década de los ’90 con distintos proyectos. Uno de los más significativos fue el trío Payaya.

Pese a su matriz de composición, con técnicas que estudió en la Universidad Católica, también combina las series libres desde los punto de vista rockeros y experimentales y de hecho este año estrenó la obra “Música para 14 músicos en cinco partes”, escrita para la Agrupación para la Composición e Improvisación Contemporáneas, una orquesta mayor de jazz que tiene a varios de los músicos de Los ogros del Swing en sus filas en plena fase improvisacional, dirigida por los símbolos,´señales, números y letras por Díaz desde el estrado. Esta noche Raúl Díaz volverá a dirigir improvisaciones colectivas frente a Los Ogros del Swing.