No sólo personas vinculadas al mundo de la música y la cultura han ido a despedir a Mercedes Sosa en el edificio del Congreso.
Reuters
BUENOS AIRES.- El técnico de la selección argentina de fútbol, Diego Maradona, visitó esta madrugada la capilla ardiente levantada en el Congreso en Buenos Aires para darle el último adiós a la cantante popular Mercedes Sosa, a quien consideró la "diosa de la libertad".
"Mercedes Sosa cantaba con una libertad que no la tiene nadie, ni en este país ni en el mundo. Yo no sé inglés, pero me parece que Mercedes Sosa, con la libertad que cantaba, ninguna (otra) mujer tiene ovarios como para cantar lo que cantaba ella", declaró emocionado el "Diez".
Maradona llegó en la madrugada al Salón de Pasos Perdidos del Parlamento, cuando ya quedaba poca gente, acompañado de su hija Dalma y su ex esposa Claudia Villafañe. Recordó los momentos que pasaron juntos en Barcelona y aseguró que su relación con "La Negra" fue "siempre de buena leche, prácticamente de madre".
"Cuando me veía mal decía: 'Dieguito, cuidate'. Cuando me veía bien, 'qué bien estás'. Cuando yo la imité le dije si se había molestado y dijo: 'Lo hiciste fenómeno'. Era grande hasta en eso", destacó.
Maradona le dio además un emotivo abrazo al hijo de Sosa, Fabián Matus, quien agradeció el apoyo popular que recibió durante la enfermedad y la muerte de su madre, este domingo.
"La mami fue una mujer que vivió su vida como quiso y creo que no le quedó nada por hacer, fue una luchadora de la vida y todos estamos tristes por su partida. Por eso es que no tengo más que palabras de agradecimiento para todos y el respeto con que se manejó su enfermedad y el deceso", declaró.
Destacó asimismo la despedida que le brindó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. "Fue un momento muy emotivo porque se tenían un cariño muy especial y varias veces dialogaron como dos grandes amigas", relató.
Matus reveló en tanto que en sus últimos días días de vida "se empachó de música muy variada y escuchando los programas de radio que ella siempre escuchó, hasta que el jueves cuando entró en coma farmacológico quedó inconsciente".
Mercedes Sosa murió en la madrugada del domingo y miles de personas se acercaron al Congreso nacional para despedirla. Sus restos serán cremados y las cenizas, esparcidas por su provincia natal, Tucumán, donde se afianzó el movimiento de la nueva canción que lideró, y Buenos Aires, donde residió desde los años 60.