LONDRES.- Después de sus instalaciones con calaveras forradas de diamantes, el artista británico Damien Hirst regresa ahora a la pintura clásica con la exposición "No Love Lost, Blue Paintings", que abre sus puertas mañana en la reputada Wallace Collection londinense.
Entre los 25 óleos del artista, pintados entre 2006 y 2008, hay dos trípticos. En algunos de los cuadros retoma el motivo de la calavera. Hirst, polémico por la comercialidad de sus obras, subrayó que con esta exposición pretende que se lo reconozca como artista.
La Wallace Collection es famosa por albergar a antiguos maestros como Tiziano, Rembrandt o Velázquez. Hasta ahora, Hirst había expuesto principalmente en galerías contemporáneas.
A menudo, se ha criticado al artista por pensar más en lo comercial que en el arte, especialmente en los lienzos pintados por él. Otros, como sus "spot paintings", los realizan en gran medida sus colaboradores.
Además de Lucian Freud, Hirst es el segundo artista vivo que tiene una exposición en el museo. Ésta podrá verse hasta el 24 de enero.
En 2008, el artista de 44 años saltó a los titulares con la subasta de sus obras en Sotheby's, donde consiguió el precio récord de casi 140 millones de euros (unos 207 millones de dólares).