Las editoriales aprovecharon el impulso de ''Santiago Negro'' para editar en el país las obras de Andreu Martin y otros autores del género.
NormaSANTIAGO.- "La novela negra apunta a nuestros temores más próximos, no temores metafísicos, sino a los que tienen que ver con salir a la calle. Cuando salimos, queremos que al volver a casa todo esté como lo dejamos, que la gente nos respete, que no nos roben, sentirnos seguros. La novela negra habla de este temor a las cosas que quisiéramos que jamás nos ocurran, y el solo hecho de leerla o escribirla es una forma de exorcismo".
Así explica español Andreu Martin las razones por las cuales la novela negra se encuentra otra vez en movimiento ascendente, un efecto en el que tiene relación el impacto de autores más populares como Stieg Larrson (que a Martin no le gusta nada), pero también el trabajo persistente que han realizado escritores como él mismo.
Martin es considerado como uno de los principales exponentes del género en lengua castellana, y en estos días se encuentra en Chile para participar en "Santiago Negro", el encuentro consagrado a la novela negra que se desarrolla hasta este domingo 18, con diversas actividades en el Centro Cultural de España, la Cineteca Nacional y la Biblioteca de Santiago.
Sobre el evento, el español asegura que "es absolutamente necesario para la literatura en lengua castellana. Hacemos festivales en España, México, Argentina, pero necesitábamos hacer éste en Santiago".
Andreu Martin es uno de los visitantes más ilustres del encuentro, lugar que comparte con su compatriota Juan Madrid y con otros como los chilenos Roberto Ampuero y Ramón Díaz Eterovic.
"Santiago Negro" y su visita serán los impulsores de la edición en Chile de algunas de sus principales obras, entre las que se cuentan "Por el amor de Dios", "El día menos pensado", "Prótesis" y "Corpus delicti", todas al alero de editorial Norma.
De la mano de Ediciones B, también llegaron a Chile las novelas de Juan Madrid, entre ellas "Pájaro en mano", "Adiós princesita", "Las apariencias no engañan" y "Cuentas pendientes".