Ocho crónicas son las que integran el libro, además de una breve entrevista con cada autor acerca de su trabajo.
Uqbar / UAISANTIAGO.- No son pocos los profesores de redacción periodística que, consultados por sus alumnos, se encuentran con más de un problema a la hora de definir en una frase qué es, exactamente, la crónica.
Tal vez la más literaria de las estructuras periodísticas, muchas veces es mejor explicarla por lo que no es o por lo que parece. Es el acercamiento que también hace en sus primeras páginas el libro "Historia de una mujer bomba y otras crónicas de América Latina", una recopilación con algunas de las más celebradas historias publicadas en medios del continente, pesquisadas al alero de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI).
"Situada en una encrucijada entre el periodismo de investigación y el periodismo en profundidad, la crónica se define, en la última línea, por dos pasiones: La del detalle y la del relato", dice Ascanio Cavallo en la presentación del volumen.
"Lo que se persigue con devoción es el cuento completo; poder narrarlo con todos sus detalles. con escenas de terror o de genialidades imposibles, con personas que nos hablan como si estuvieran sentadas en nuestra mesa", agrega Bárbara Fuentes, editora del libro.
Con esos parámetros, la también académica de la UAI salió a buscar historias plasmadas en distintos medios escritos del continente. Entre las que encontró, ocho la cautivaron especialmente, y son las que decidió rescatar de alguna revista progresivamente vieja para importarlas a Chile en un libro recién llegado a las tiendas (Uqbar, $9.900).
Se trata de historias 100 por ciento reales, que hablan de personajes conocidos o de completos anónimos, pero que han sido indagadas en profundidad por sus autores, quienes además se preocuparon de poner sus propios sello y estilo a disposición del relato.
Así se ofrece un artículo como el que da nombre al libro, "Historia de una mujer bomba", que expone el caso más emblemático de tráfico de mujeres en la Argentina (donde la falta de tipificación del delito ha permitido multiplicarlo).
La crónica fue publicada por la argentina Josefina Licitra en revista "Gatopardo", y cuenta la historia de Susana Trimarco, madre de Marita Verón, una joven raptada por redes de secuestro de mujeres para encerrarlas en prostíbulos.
El relato se adentra en la lucha diaria de esa madre, que ha llegado a vestirse de prostituta para entrar en el submundo que mantiene de rehén a su hija. Y aunque ha pisado sobre las huellas de Marita, no logra dar con su paradero, pero en ese trayecto sí ha logrado liberar a otras decenas de mujeres que se encuentran ejerciendo la prostitución en contra de su voluntad y bajo régimen de secuestro.
El relato de un reportero que pasó 30 días trabajando en un call center —el gran negocio global de la Argentina post-crisis y emblema de la precarización laboral en ese país— y de un periodista que tuvo acceso a la biblioteca privada de Augusto Pinochet, entre otros, completan un libro de lectura rápida e historias potentes, que también incluye una entrevista concisa con cada autor al final de cada crónica.