Noriko Sakai con lágrimas en sus ojos durante una conferencia de prensa en septiembre, cuando fue dejada en libertad condicional. Hoy el caso llegó a su fin.
AFP
TOKIO.- Una famosa cantante y actriz de Asia, conocida por su imagen de una chica dulce y corriente, fue sentenciada hoy a la cárcel por uso de estimulantes ilegales, en el más reciente caso de drogas de celebridades en Japón.
La corte ordenó una condena de 18 meses en prisión para Noriko Sakai, de 38 años, quien saltó a la fama a fines de la década de 1980 con canciones pop antes de convertirse en una actriz.
El escándalo de drogas de Sakai ha acaparado los titulares de la prensa japonesa y en partes de Asia donde la actriz tiene muchos seguidores desde que ella y su esposo, Yuichi Takaso, fueron arrestados en agosto por posesión y uso de drogas.
"Extraño los días cuando ella debutó y se convirtió en una sensación adorable. Ahora que ella está en este tipo de situación, estoy impactado", dijo Yoshiyuki Fujimoto, 42 años, un programador de sistemas que esperó para obtener un asiento dentro de la sala de corte.
Sakai permaneció detenida durante unos 40 días tras su arresto, antes de ser liberada bajo fianza por 5 millones de yen (55.500 dólares).
Su juicio ha atraido la atención de medios de comunicación y del público en un país donde rige una actitud muy seria ante el uso de drogas que se debe, en parte, al fuerte abuso de anfetamina tras la Segunda Guerra Mundial, cuando la droga era vendida sin receta médica.
Más de 3.000 personas esperaron en un parque cerca de tribunales para obtener una de las 21 entradas de galería para ver la sentencia, mientras otros cientos de personas lucharon con miembros de la prensa para ver a la actriz mientras ingresaba y salía del edificio.
El caso de Sakai sigue a una serie de arrestos de celebridades de alto perfil por cargos de abuso de drogas, incluyendo un luchador de sumo ruso que fue expulsado del deporte.
Aunque la legalización de la marihuana o el uso de la droga con fines médicos es tema de debate o ha sido aprobado en algunos países de Occidente, estas ideas no se han extendido a Japón.
En uno de los más conocidos arrestos en el país, el ex Beatle Paul McCartney pasó nueve días en una cárcel de Tokio en la década de 1980 luego de arribar en un aeropuerto japonés con una bolsa de marihuana en su maleta.