Rühlmann, de 37 años de edad, se había propuesto como objetivo llegar a las 72 horas, pero tuvo que desistir en su empeño tras las 62, porque estaba resfriado, lo que desató la preocupación de los asistentes.
El cofundador del Teatro Nana de Bamberg y sus 40 ayudantes, que continuaron el maratón hasta alcanzar el objetivo de 72 horas, consiguieron leer en total, desde el pasado domingo por la tarde, cerca de 300 novelas y relatos policíacos.
Más de 2.000 páginas de bibliografía fueron consumidas por estos maratonianos de la lectura rápida, durante la competición, que tuvo lugar en una sala del Teatro E.T.A.-Hoffmann de Bamberg.
A lo largo de las 62 horas, Rühlmann tan sólo hizo una pausa de diez minutos cada dos horas, que le servía para ir al servicio, fumarse un cigarro y comer, descansos en los que sus ayudantes continuaban la lectura.
El anterior récord del mundo, según datos oficiales, fue batido en 2002 en Múnich, cuando unos 100 escritores que participaban en el certamen "Criminale" leyeron cada media hora sus novelas policíacas, y sumaron en total 50 horas.